Perdidos (Lost)

¡Hola a tod@s! Esta entrada no la tenía planeada, pero esta mañana he visto en las noticias algo que ha llamado mi atención y he decidido plasmarlo en el blog. Resulta que hoy hace 10 años que se presentó en la Comic Con el episodio piloto de la ya mítica Perdidos (Lost).

Las aventuras de los pasajeros del Oceanic 815 me cautivaron y me tuvieron pendiente de la pantalla durante 6 temporadas con altos y bajos, todo hay que decirlo. Hoy cuando he vuelto a ver a Jack, Kate, Locke y compañía he vuelto a recordar todos esos momentos en los que compartí las posibles teorías que rodeaban a la famosa isla y sus habitantes con mis amigos y he decidido poner lo que ha significado la serie para mí. Esto no es una crítica ni nada por el estilo. Es mi historia con Lost. Una manera de rendirle homenaje a una serie que tuvo momentos dramáticos, emotivos y cómicos. Eso sí me hizo llorar bastante.  Por eso si no la habéis visto, id con cuidado porque  puede que suelte algún...

¡¡SPOILER!!

Recuerdo que descubrí esta serie una tarde de verano después de que en televisión emitieran, creo recordar, la final de Wimbledon. Después del torneo empezó Lost y me quedé enganchada a los dos episodios que dieron. ¿Quién es ese hombre que  se despierta en medio de la isla vestido con un elegante traje? Todo era muy extraño, pero a los pocos segundos descubrí que, en realidad, había habido un grave accidente aéreo y la tranquila isla estaba ahora ocupada por un avión destrozado y con él todas sus víctimas, algunas han sobrevivido, pero otros no han tenido la misma suerte. A partir de ahora, la isla se convertirá en el hogar de no solamente los supervivientes, sino también de los espectadores. Todo parece normal, pero la isla oculta grandes misterios. Una especie de humo negro se mueve sigilosamente entre los árboles, un oso polar aparece como por arte de magia y una misteriosa escotilla parece ocultar algún que otro secreto. No obstante, hay algo más importante: los supervivientes no están solos, los conocidos como Los otros, acechan a los supervivientes y tienen que estar atentos para no convertirse en sus víctimas.

Cómo podéis ver la historia pinta muy bien. La primera temporada me encandiló ya que fue una introducción de todos estos misterios, pero lo más importante, de los personajes. Conocimos a un grupo de personas muy variado, personajes muy complejos y diferentes entre sí, pero que se complementaban muy bien.

Sin embargo, la serie dejó de entusiasmarme entre la segunda y tercera temporada. Se me volvió muy monótona y los misterios no se resolvían, al contrario, iban apareciendo nuevos interrogantes, pero no se solucionaba nada. Cuando pensé que la serie había perdido el norte, la última escena de la tercera temporada me dejó con la boca abierta y creo que no fui la única. ¿Qué hacían Jack Kate fuera de la isla? ¿Se conocían de antes? ¿Qué le ocurre a Jack? Internet se puso en marcha y empezaron a salir todo tipo de especulaciones. La serie volvió a ponerse en primera línea de fuego y los espectadores esperamos ansiosos su cuarta entrega. Ésta no me decepcionó ya que en ella se nos muestran las respuestas a esa misteriosa última escena de la tercera temporada. En la cuarta entrega vemos como varios pasajeros salen de la isla, pero la quinta nos narra el regreso de éstos provocando el encuentro con aquellos que no pudieron escapar.

La sexta temporada fue la última entrega y creo que volvió a quedarse un poco estancada ya que los misterios seguían sin encontrar una respuesta, parecía que todo se iba a resolver en el último episodio y finalmente… llegó el día.

Recuerdo que ese día no trabajaba y el canal Cuatro iba a emitir en directo el final de Lost. Me levanté a las cinco y media de la mañana para estar preparada y cuando empezó, ¡fue un desastre! jajaja Los subtítulos no funcionaban, se paraba la imagen y con ella el diálogo, y cuando el episodio finalizó me había enterado de muy pocas cosas, pero eso no impidió que me emocionara. Así que lo que hice fue volver a ver el episodio en la red y ya las cosas me quedaron claras. Eso sí volví a emocionarme, soy una llorona, qué se le va a hacer.

Veamos, la gente que me conoce sabe que soy una persona que prefiere más las historias de los personajes que los misterios que rodean a la trama. Siempre he sido así ya que son los personajes los que establecen contigo un vínculo con la historia. Hace que te preocupes por ellos y te intereses de esta manera por la trama ya que les influye de manera directa. Por ese motivo, cuando vi el final de Lost me quedé muy satisfecha. Cada personaje había tenido su viaje, su prueba, y nosotros habíamos sido testigos de todas  ellas. Habían superado sus miedos y fantasmas y habían encontrado por fin la paz. ¿La isla fue un examen para todos ellos? Es posible. También soy una romántica y los productores de la serie dieron en el clavo cuando nos enseñaron que Jack y Kate estaban destinados el uno con el otro aunque no tuvieron el típico final feliz. Llamadme cursi, pero me encantó, aunque con Kate tuve mis más y mis menos, todo hay que decirlo.

En lo que se refiere a los personajes, Lost tuvo un final redondo. Sin embargo, falló en lo que se refiere a los misterios y la mitología que se creó alrededor de ella. Todos esperábamos respuestas y no nos las dieron. Esto podría dar para muchos posts y debates y la verdad es que tengo sentimientos encontrados al respecto. Por un lado, nos han dicho que muchos misterios no tienen que tener una respuesta y es verdad, pero crearon una trama tan interesante y despertó tantas teorías que creo que tendrían que haber dado una respuesta a nuestras especulaciones. En este sentido, entiendo que muchos fans se sientan engañados, e incluso estafados, al ver que sus preguntas no han sido contestadas. Pero por otro lado, se nos dijo que esta serie era una serie de personajes y que los misterios eran algo secundario, éstos eran parte del camino que todas estas personas tenían que hacer. Era una serie de personajes y su final estuvo centrado en ellos y en nada más. Por esa razón tengo sentimientos encontrados. Reconozco que quedé satisfecha con su desenlace porque a mí siempre me han importado mucho los personajes, pero tengo la espinita clavada con lo referente a los misterios sin resolver. Creo que esto último ha manchado un poco el legado de Lost, pero espero que con el tiempo esto cambie.

He dicho que esta serie me ha hecho llorar… y bastante. Lost no tenía piedad con sus personajes, ninguno estaba a salvo, y cada vez que uno decía adiós se me caía más de una lagrimita. La primera muerte fue la de Boone y no me la esperé para nada. Pensaba que no serían capaces de matar a un personaje tan querido y me equivoqué. Me quedé bastante parada. Aunque reconozco que con algunos no me emocioné porque no me caían muy bien y no me cautivaron, como por ejemplo Ana Lucía, entre otros. 

En la serie había “buenos” y “malos” y uno de los malos que más me gustaron fue el grandísimo Ben Linus, interpretado por el excelente Michael Emerson. Muchos creen que es imposible querer a un villano, pero cuando éste está bien escrito y tiene una gran historia detrás es imposible que no esté entre tus favoritos. John Locke fue otro gran personaje, pero creo que el desenlace que se le dio no fue justo ya que Locke prometía muchísimo y su final no estuvo a la altura. Locke representaba la fe y Jack, la ciencia. El líder de los supervivientes del Oceanic 815 fue ganándose amistades y enemistades a lo largo de la serie, pero Jack siempre fue el referente. Muchos piensan que la serie está centrada en el viaje de Jack. Su muerte me hizo llorar muchísimo y a día de hoy me sigue emocionando. Todo fue tan simbólico… Lost empezó con Jack tumbado en la selva que conformaba la isla, con su ojo en un primerísimo plano y con Vincent, el perro de Walt, descubriéndolo. Seis años después, Lost  terminó con él, en el mismo sitio, tumbado sobre la selva que conforma la isla mientras observa como un avión saca a sus compañeros de ésta. Con una sonrisa de satisfacción y Vincent acompañándolo en sus últimos minutos, la cámara vuelve a enfocar su ojo para que los espectadores podamos ver como éste se cierra. Jack muere y con él la serie. Con él empezó y acabó este inolvidable viaje.

Lost es una serie que no es perfecta, pero nos ha dado grandísimos momentos que ya forman parte de la cultura popular. Es una serie que me hizo vibrar, enfadar, sonreír y llorar… Estamos  ante una historia de personajes. Nunca hay que olvidar eso. Reconozco que no he vuelto a ver la serie entera desde que ésta terminó hace ahora cuatro años, pero conociendo el final, creo que si la volviese a ver lo haría con otros ojos y centrándome en lo que de verdad importa. ¿La recomiendo? Muchísimo. Lost es una serie que no deja indiferente a nadie y sus personajes, la mayoría de ellos, se te quedan grabados.  Lost es el viaje emocional y espiritual de un grupo de personas que no tienen vidas perfectas. Parece que están destinados al dolor y al sufrimiento. Sin embargo, la isla les da una nueva oportunidad para volver a empezar. ¿La aprovecharán?

Antes de acabar, os quiero decir que si no habéis escuchado la banda sonora de la serie, hacedlo sí o sí porque Michael Giacchino es, simplemente, un genio. Sus piezas hacen que el espectador experimente diferentes sentimientos y se involucre con la historia y todos los personajes que la conforman. Os dejo al final un vídeo que mezcla el trabajo de Giacchino y una escena importante. Sin duda, una de mis favoritas.

Hoy cuando he vuelto a ver a Lost me he acordado de todos los momentos que viví junto a la serie y este es mi pequeño homenaje a una historia que fue un fenómeno social y está destinada, si no lo es ya, a ser un clásico imprescindible de la televisión.

¡Hasta la próxima!