Mis Crónicas Londinenses: Día 2
¡Hola
a tod@s! Ya vuelvo a estar por aquí con la crónica de mi viaje. El segundo día
en Londres no tuvo nada que ver con el primero ya que en esta ocasión habíamos
dormido toda la noche y eso se nota. Además, el primer día llegamos al mediodía
y ya perdimos toda la mañana, pero eso ya no volvería a pasar. Después de
dormir toda la noche del tirón mi hermana y yo nos levantamos a primera hora súper
motivadas para patearnos la ciudad durante el día. Así que después del desayuno
que ofrecía el albergue (muy sencillito, basado en unas tostadas con mermelada o
mantequilla y acompañadas de café con leche o zumo) pusimos rumbo al Royal Mail
que se encontraba en Bayswater para mandar desde allí algunas postales a
nuestros amigos. Nos hacía ilusión enviárselas y a ellos recibirlas así que
nosotras estábamos encantadas.
La
mañana en Londres se presentaba nublada y con riesgo de lluvia. Además, hacía
bastante fresquito, por no decir que estaba tiritando. Cuando salimos del Royal
Mail nos encontramos con una paradita de flores que era encantadora y no
pudimos evitar sacarle una foto para el recuerdo.
Una
vez hecha la foto nos dirigimos a uno de estos supermercados que están abiertos
durante las 24 horas del día para cargar nuestras mochilas y después de esto,
cruzamos otra vez Kensington Gardens para ir a parar al Royal Albert Hall ya
que allí habíamos quedado con nuestra amiga. Mientras la esperábamos nos
hicimos las típicas fotos con una cabina roja. ¡Teníamos que aprovechar el
tiempo! Una vez todas juntas, nuestro destino número uno de aquel día era
visitar el Museo de Historia Natural. Durante el camino mi hermana se tuvo que hacer
una foto en un Starbucks ya que, como dije en la anterior entrada, los adora.
Reconozco que nos despistamos un poco (otra vez) y no encontrábamos el museo así que un señor
inglés muy amable nos indicó el camino y se despidió de nosotras con un “Have a
lovely day, ladies!”
Cuando
llegamos allí vimos que el edificio que conforma el museo era grandioso y muy, pero muy bonito. Era
muy señorial y elegante y creo que la estructura y el estilo es
gótico/victoriano. Después de hacer una cola inmensa accedimos al
interior del edificio a través del jardín botánico y la colección que hay en él
es impresionante ya que te da la sensación de que los animales, en cualquier
momento, se van a mover.
Estuvimos
bastante rato admirando toda la colección, pero después nos dimos un respiro
para ir al servicio de comida que se encuentra dentro del museo. ¡Nos encanta comer! Más tarde
fuimos a visitar la sección dedicada a los dinosaurios y ya damos por
finalizada la excursión. En serio, tengo muchísimas fotos de esa mañana pero no
las puedo poner todas porque entonces mi ordenador no me deja publicar.
Una
vez fuera sacamos unas fotos de la pista de patinaje sobre hielo y el tío vivo
que había justo al lado del museo. El ambiente navideño ya se hacía notar…
Así
que tras esta visita al museo, nuestra siguiente parada era la estación de Earl’s Court
ya que allí se encuentra la cabina (o la TARDIS para los que seguimos la serie)
de Doctor Who. Tenía muy claro que si iba a Londres no iba a desaprovechar el
momento y tenía que saciar mi vena friki si o sí. Así que fuimos andando hasta
la estación (había un buen trozo) y una vez allí me hice la esperada
fotografía. Es el único modelo que se encuentra en Londres de las cabinas de
policía que se usaban en los sesenta. Por lo tanto, una reliquia.
Tras
comprar unas bebidas, nos dirigimos hacia algún lugar para comer. No teníamos
un destino fijo, pero a los pocos minutos encontramos un parque muy tranquilo
para comer nuestros bocadillos. No recuerdo el nombre del parque (lo sé soy
un desastre) y me da rabia porque me gustó mucho. Sólo recuerdo que muy cerca
del parque había un cementerio. El lugar estaba repleto de bancos con
inscripciones de las personas que ya no están y al lado del camino
hay una especie de parque con un merendero en el que los niños juegan partidos
de futbol.
Después
de la comida, salimos por un atajo que el parque ofrecía y paramos a una calle
principal llena de casas adornadas con la típica celebración de Halloween. ¡Me
sentía como en una película americana! La decoración era espectacular y nos
quedamos con la boca abierta. Te daban ganas de picar a las puertas y decir “truco
o trato”.
Nuestro
paseo nos llevó a Kensington High Street. Estaba llena de gente y con
decoración navideña. Queríamos ir a Covent Garden, pero el mercado cerraba muy
temprano y no nos daba tiempo. Si hubiésemos cogido el transporte público hubiésemos
llegado, pero íbamos a pie. ¿Así que adónde podíamos ir? ¡Pues a Piccadilly! ¡Nosotras
a la aventura! Madre mía, estuvimos andando toda la tarde. Mi hermana estaba
fatal de las rodillas y pasó un viaje bastante malo en este sentido, pero hizo
un esfuerzo monumental. Cuando llegamos allí había muchísima actividad. La
gente iba disfrazada y todo el mundo estaba bastante animado. Sin embargo,
nosotras buscábamos un bar para poder cenar algo. ¡Estábamos hambrientas!
Cenamos un pastel de carne con guarnición que nos supo a gloria. Eso sí en
Londres la propina es obligatoria. Te ponen lo que debes en la cuenta y nos
quedamos muertas. Después de la cena dimos un paseo por la zona, pero estaba hasta
arriba de gente. Esta vez sí que cogimos el bus ya que aparte de encontrarnos
bastante alejadas del albergue, también nos daba miedo volver solas ya que era
de noche. Así que cogimos el bus y en 10 minutos ya estábamos “en casa”. En serio,
¿cómo lo hizo el bus para llegar tan rápido después de nuestra caminata?
Una
vez en el albergue pudimos ponernos cómodas y nuestros pies nos lo agradecieron
bastante. El día había sido muy productivo y el hecho de ir a pie ayuda mucho (obviamente
si el lugar está en la otra punta se coge el metro o el bus) ya que se ven
lugares que con el transporte público no prestarías mucha atención. El día acabó muy bien por toda la excursión y
porque conocimos a dos chicos de Sevilla muy simpáticos que compartían
habitación con nosotras y a partir de ese día se convirtieron en compañeros de
cena y también de alguna que otra excursión. La verdad es que el viaje cada vez
me iba gustando más. Había llegado el momento de descansar ya que al día
siguiente nos tocaba visitar la parte más turística de Londres… pero para esto tendréis
que esperar unos días.
¡Nos
vemos pronto!
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar¡Hola, Laura!
ResponderEliminar¡Sí que aprovechásteis bien el día! El Museo de Historia Natural no lo vi, por las fotos que has puesto se ve grandioso, se ve muy bonito y tiene que ser espectacular poder ver los animales y las plantas, además de esa comida que tiene una pinta...
El museo que vi yo fue el Museo Británico, ya de por sí su arquitectura me encantó, pero lo que más me gustó fue la sección del Antiguo Egipto, la cual fue impresionante, me quedé sin palabras cuando vi las momias.
Piccadilly me sorprendió mucho, quizá sea la zona donde se encuentra vida después de cierta hora, que allí todo cierra muy temprano comparado con España.
¡Qué pasada las casas decoradas! Especialmente la de la araña gigante.
Convent Garden me gustó mucho.
Es verdad que ves muchas más cosas si te desplazas andando, pero cuando tienes el tiempo apurado... Yo iba con el carnet de estudiante internacional y el abono de metro y de autobús que saqué me salió así más barato.
Deseando leer tu siguiente entrega de tu viaje a Londres.
Besotes!!!
PD. He tenido algún problemilla para comentar, espero que esta vez te llegue bien.
¡Hola, Mari Carmen!
EliminarEl mensaje ha llegado correctamente :-) Me hubiese encantado poner más fotos del Museo de Historia Natural, pero no he podido porque el ordenador se me bloquea. ¡Pero tengo muchísimas! También fui al Museo Británico, pero eso se verá en la cuarta entrega ;-) Covent Garden también me gustó mucho y en Navidad es precioso :-)
Las casas decoradas me encantaron, vamos, igual que aquí jajaja Cuando me encontré con ellas no me lo podía creer. Nunca pensé que vería una decoración así en persona, pensé que eso pasaba en América.
Es verdad que el uso de transporte público tiene, obviamente, sus ventajas ya que puedes ver muchos sitios. Me quedé sin ir a algunos sitios que espero compensar en el siguiente viaje. Uno de ellos fue el tour de Jack el Destripador. Hubiese sido fantástico hacerlo y además en Halloween... Este verano espero sacarme la espinita :-)
¡Un besazo enorme!
Empezaban pronto la Navidad algunos allí. Lo de la calle de Halloween se sale me ha encantado y lo del cementerio,... Tengo que ir algún día como turista y no como curranta. Todo lo que me he estado perdiendo. Ya te digo lo que he visto de turismo es lo que caiga en el trayecto del taxi al hotel y del hotel a la sala del evento que me tocara. Y alguna escapadita por cerca del sitio.
ResponderEliminarUmmm,... ¿habrá tercera parte? :P
Nus leemos
¡Hola, Angy!
EliminarEspero que puedas disfrutar de un viaje a Londres en condiciones y lo disfrutes muchísimo. Pues sí había un cementerio y espero que no sea el cementerio de Brompton porque si es así me tiraría de los pelos ya que allí se encuentra Fanny Brawne, la musa del poeta John Keats. También hay un cementerio fantástico en Londres que me muero por visitar. Es el cementerio de Highgate, ¿lo conoces? Hay muchas leyendas acerca de este lugar...
¡Claro que habrá tercera parte! En total, son cinco partes :-)
¡Nos leemos!
¡Un beso!
Ay lo de las propinas que mal lo llevo yo!! Es un protocolo que se me escapa y ya en libras... te dejan un tembleque de aquí te espero.
ResponderEliminarNunca visité yo el museo de Historia Natural y ahora viendo tus fotos, apetece un montón!!! Y que identifica me siento con ese punto friki de visitar lugares de pelis o series :-D Ya puede ser una triste baldosa rota que como me recuerde a una historia que me guste mucho... allá que voy!!
Y la decoración de las cosas total!! La verdad es que las casas de esas zonas se prestan a ello con la verja y todo el montaje, debes entrar en un bucle y querer poner de todo!!
Me dejas deseando querer saber más!! Besines!
¡Hola, guapa!
EliminarEl Museo de Historia Natural es una auténtica pasada y pude apreciar todavía más lo bonito que era a través de las fotos.
Pues sí con lo de las propinas no se cortan ni un pelo. Nos quedamos blancas cuando veíamos la cuenta jajaja
Lo del punto friki veo que eres de las mías jajaja Si sé que en algún lugar (aunque sea insignificante) ha estado algo/alguien de la que soy fan voy para allá sin pensarlo dos veces xD Creo que si fuese a un lugar como Bath me haría fotos por toda la ciudad jajaja
¡Dentro de unos días la tercera parte!
¡Besitos!
Hola Laura,
ResponderEliminarMe ha encantado lo de la decoración de Halloween. No tenía ni idea que en el Reino Unido se lo tomasen tan en serio y que lo decorasen tan espectacularmente.
El museo de historia natural es nuestra primera parada en el viaje que estamos preparando. ¡Tiene pinta de ser genial!
Me has dejado muerta con el tema de las propinas. No tenía ni idea que en Londres también se estilaba. La última vez que hice una ruta por Inglaterra no me encontré con ese problemilla. ¡Lo tendré en cuenta! Veo que no has estado en Bath, te lo recomiendo mucho mucho. Es una ciudad pequeñita, pero preciosa. Parece que el tiempo no haya pasado por ella y tiene muchas cosas con encanto para visitar. Con el plus añadido, de Jane Austen. Algún año iré en septiembre que es cuando organizan el festival anual, tiene que ser una pasada!
Hay que ver como me enrollo hablando de Inglaterra!!! jaja
Espero tu próximo crónica!
Besos!!
¡Hola, Raquel!
EliminarLa decoración era espectacular. Aun me quedo embobada mirando las fotos. Decoraciones así no se ven en Barcelona. Lo de la propina es un handicap ya que te lo exigen y no hay otra opción. El Museo de Historia Natural es espectacular y muy bonito, te gustará mucho. Hay muuuuucha cola, pero no te asustes nosotras no tuvimos que esperar mucho. Al final no fue nada. Ay, quiero ir a Bath!! Para mí es sinónimo de mi querida Jane Austen. Dicen que es la ciudad más bonita de Inglaterra. Habrá que comprobarlo!!
Y no te preocupes, ¡me encanta hablar de Inglaterra! Yo sí que me enrollo!!
Un beso!!
Wow, me encantan las fotos que has enseñado, y eso que seguro que tienes un montón más.
ResponderEliminarTienes razón con lo de caminar por la ciudad, aunque canse mucho y sea mucho más lento, te sirve para conocer más lugares. A mi me pasa cuando voy por Barcelona, si puedo ir andando mejor jaja
¡A por el 3r día!
¡Hola otra vez!
EliminarPues sí tengo muchísimas fotos que se han tenido que quedar guardadas. Patear la ciudad me encantó y vimos muchos sitios. Lo malo es que si tenías que ir a un lugar más lejano tenías que coger el transporte sí o sí. Y como íbamos con el presupuesto justo intentábamos administrarnos lo mejor posible. Nos hubiese encantado ir a otros lugares pero no pudimos. La próxima vez!!
Barcelona se tiene que ver andando, no hay otra jajaja
¡Un beso!
Me ha encantado la entrada: el museo, el parque, la foto de Starbucks (qué gracia me ha hecho, siempre me encanta saber de más gente adicta a estos establecimientos, jeje)... pero me quedo con el amable señor inglés: si alguna vez un desconocido se despide de mí de esa manera, creo que me pasaré sonriendo tres días seguidos... ♥
ResponderEliminarA seguir leyendo :-).
¡Hola, Marta!
EliminarLa anécdota del señor inglés me encanta ya que los ingleses tienen fama de estirados y este hombre, físicamente, parecía ser muy estirado. Sin embargo, fue muy amable y simpático con nosotras. Cuando se fue nos quedamos encantadas y sonriendo como tontas.
¡Un beso!
cantado la entrada: el museo, el parque, la foto de Starbucks (qué gracia me ha hecho, siempre me encanta saber de más gente adicta a estos establecimientos, jeje)... pero me quedo con el amable señor inglés: si alguna vez un desconocido se despide de mí de esa manera, creo que me pasaré sonriendo tres días seguidos la-voz.net/cultura-chancay/
ResponderEliminar¡Hola! Madre mía, qué ilusión me hace que aún haya gente descubriendo esta entrada, o crónicas, que escribí sobre Londres. Han pasado casi 8 años, ¡el tiempo vuela!, y lo recuerdo con mucho cariño. Tengo muchas ganas de volver a tierras inglesas (de hecho, el pasado verano iba a hacerlo, pero la pandemia me lo impidió). Y sí, aún recuerdo a ese caballero inglés que nos ayudó y que nos dibujó una sonrisa en la boca. Fue encantador.
Eliminar¡Muchas gracias por tu comentario!
¡Un saludo!