Stranger Things: Tenemos que hablar de Nancy Wheeler

 

Fuente: Netflix

Esta entrada contiene spoilers.

¡Hola, chic@s! La cuarta temporada de Stranger Things nos ha brindado grandes momentos (y personajes) que se han quedado grabados en nuestra memoria, y personalmente creo que esta cuarta entrega nos ha confirmado una vez más algo que todos sabemos, pero de lo que no se ha hablado mucho. ¿Sabéis a lo que me refiero? Algunos os haréis una idea y otros no, pero creo que ha llegado el momento de reivindicar a la gran Nancy Wheeler.

Siempre que hablo de Stranger Things menciono que Steve es mi personaje favorito y que Max le sigue muy de cerca. Sin embargo, lo que muy poca gente sabe es que Nancy siempre ha estado en mi top 3, pero, por alguna razón u otra, nunca lo he dicho. ¿Por qué? Creo que Nancy, a pesar de su grandeza, siempre ha quedado relegada a un segundo plano debido al grupo encabezado por Millie Bobby Brown (y con esto me refiero al grupo de niños que ya no son tan niños) o al ya mencionado Steve. Nancy siempre ha sido un personaje fuerte y potente, pero tenemos que ser sinceros y reconocer que esta no ha gozado de la promoción que otros han tenido; algo que para mí es clave, y debido a ello siempre ha quedado un poco en el olvido. Por lo tanto, se podría decir que Nancy es la gran heroína infravalorada de la serie de los Hermanos Duffer.

Si echamos un vistazo a su historia veremos que Nancy empezó la serie encarnando el prototipo de la buena chica. Nancy es una buena estudiante, una buena amiga, una buena hija y una buena hermana. Vive en una burbuja de protección y estabilidad y su vida parece perfecta. Sin embargo, su impoluta imagen empieza a desdibujarse cuando se interesa por Steve, un chico que es todo lo opuesto a ella. Debido a esto, Nancy empieza a cambiar y amenaza con dejar de ser fiel a ella misma. Esto es algo que su amiga Barb también le menciona, pero Nancy es una adolescente y no le da ninguna importancia. El antes y el después de nuestra protagonista se produce cuando esta decide dejar sola a Barb para acudir a su encuentro con Steve,  y durante esos minutos se produce un hecho insólito que nadie esperaba: Barb, en ese momento de soledad y vulnerabilidad, es arrastrada y asesinada en el Upside Down. La desaparición de su amiga atormenta a Nancy, así que la adolescente decide investigar qué ha ocurrido con Barb, aunque eso signifique que tenga que enfrentarse al mismísimo demonio. Parece que la nueva Nancy ha despertado, o siempre fue así pero nunca tuvo motivos para serlo, y a partir de este momento veremos a una chica valiente y decidida, que está llena de coraje y valor, y que hará lo que sea para vengar a su querida amiga.

Fuente: Netflix

Nancy siempre se ha caracterizado por ser un personaje que va en busca de la verdad y la justicia, y en todas las temporadas de la serie la hemos visto luchar por ello. Su trabajo como periodista en ciernes le es muy útil para introducirse en terrenos que están prohibidos y siempre ha demostrado una gran determinación y fortaleza. No se achica ante nada y siempre va a por todas. El personaje de Natalia Dyer ha crecido mucho durante estos años; ya no es ninguna niña, ahora es toda una mujer, y para mí su gran reivindicación ha llegado con la cuarta temporada de la serie. En esta ocasión, Nancy ha seguido en la misma línea que hemos visto en temporadas anteriores, pero esta vez ha sido una integrante más del grupo formado por Steve, Robin, Eddie, Dustin, Max, Lucas y Erica. Como veis es un grupo de lo más extenso y variopinto y todos ellos cuentan con el gran favor del público debido a su carisma. Como he dicho al principio, Nancy siempre ha estado en un segundo plano debido a la exposición de otros personajes, pero su dinámica con los predilectos de la audiencia no le ha pasado factura, al contrario, la ha hecho destacar y demostrar su potencial. Nancy se convierte en una de las líderes naturales del grupo y ha protagonizado momentos épicos que me han puesto los pelos de punta. Todos recordamos la batalla final contra Vecna, pero mi momento favorito es cuando Nancy se aproxima al villano sin titubear y arma en mano para dar el último toque de gracia. Ella es la encargada de rematar la faena y es en ese momento cuando su reivindicación como heroína se produce. Todo la acompaña (la historia, la música, la estética, la actitud) y la escena que protagoniza la convierte en un icono. Es como si toda su evolución como personaje se hubiese preparado para ese momento y con él todo el mundo ha podido observar y darse cuenta de la guerrera que hemos tenido enfrente durante todos estos años y que, por desgracia, no habíamos tenido en cuenta.

La cuarta temporada de Stranger Things ha sido fantástica de principio a fin, pero también ha supuesto el despertar de muchos en cuanto a Nancy se refiere. El personaje de Natalia Dyer siempre ha estado en primera línea de fuego y se ha expuesto a mil y un peligros con tal de descubrir la verdad y hacer justicia. No tiembla, no titubea y siempre está ahí para dar el primer paso. Su viaje ha sido fantástico, y sí en esta entrada os digo que Nancy, además de ser una crack, es uno de mis personajes favoritos junto a Steve y Max, y también Erica, todo hay que decirlo. Me encanta lo repelente, descarada y divertida que es esa niña ja,ja,ja,ja.

¡Hasta la próxima!

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