Crónica: Game of Thrones Live Concert Experience

¡Hola, chic@s! El pasado jueves 10 de mayo, cumplí uno de mis sueños: asistir al Game of Thrones Live Concert Experience, que tuvo lugar en el Palau Sant Jordi. No sabéis la de veces que he visto los vídeos de la gira de Ramin Djawadi (compositor de la serie) cuando este se dedicó a llevar las creaciones musicales de la serie por Estados Unidos y Canadá. Pensaba que lo más cerca que estaría de un evento de estas características sería a través de estos vídeos, pero el pasado septiembre se anunció una gira mundial, ¡que se iniciaría en España y cuyo segundo destino iba a ser Barcelona! Este anuncio me emocionó muchísimo, así que no me lo pensé dos veces y me hice con mis entradas en la preventa. ¡Cuanto antes mejor!

Siempre he pensado que las bandas sonoras son una parte fundamental en las historias ya que además de definir y dar personalidad a las tramas también transmiten mil y una emociones: alegría, tristeza, tensión, enfado, amor, compasión… Vida. Y esto es lo que sentí el pasado jueves en el Palau Sant Jordi. Mi sueño se hizo realidad, y la espera mereció la pena porque fue una experiencia increíble e inolvidable.

El concierto empezó con unas palabras de la mismísima Cersei Lannister dirigidas al público, para acto seguido arrancar con el mítico tema principal de la serie. A partir de aquí Djawadi se dirigió al público agradeciéndonos nuestra hospitalidad y nos invitó a hacer un viaje por los momentos más importantes de la serie en los que la música tenía un protagonismo importante. Djawadi nos contó que él siempre viaja junto a sus intérpretes principales, pero la orquesta y los coros siempre eran locales, y en esta ocasión les acompañaba la Orquesta Sinfónica de España.

Fue un recorrido por las siete temporadas emitidas hasta ahora y fue una gozada de principio a fin. En el escenario principal se encontraba el compositor con todo su equipo, pero en ocasiones estos se movían a través de un pasillo que daba a otro escenario más pequeño que estaba situado en medio de la pista, y en el que se encontraban más cerca del público. Djawadi tocó diferentes instrumentos, entre los que se encontraban el piano y la guitarra eléctrica, y todas las composiciones de la serie estuvieron acompañadas por una pantalla enorme y dos pequeñas en los laterales en las que podíamos ver imágenes de la serie. A todo esto hay que añadirle los efectos visuales ya que en ocasiones las imágenes venían acompañadas por fuego o potentes luces azules que rinden homenaje a los elementos de Canción de hielo y fuego.

Disfruté todos los temas, pero me gustaría destacar los siguientes:

Heir to Winterfell – Goodbye, brother: los temas de la casa Stark me pusieron los pelos de punta por esa melancolía por la que siempre se encuentran envueltos. Además, la puesta en escena para esta ocasión fue bellísima ya que la violinista principal empezó a ascender en medio de la multitud mientras la falda blanca de su vestido simulaba ser un arciano, y los pétalos rojos que empezaron a caer se quedaron prendidos en su falda representando las hojas rojas del mítico árbol.

Las lluvias de Castamere – La boda roja: el tema principal de los Lannister siempre me ha gustado porque refleja victoria y poder. Puede que los Lannister no sean del agrado de muchos, pero hay que reconocer que son los personajes más interesantes de la serie, y este tema representa la fuerza y sobriedad que hay en ellos. Después de esta pieza pasamos a La boda roja y con ella todas las emociones estuvieron a flor de piel al recordar uno de los momentos más tristes que la serie nos ha mostrado hasta la fecha.

Mhysa: éste siempre ha sido uno de mis temas favoritos y la calidad vocal de la cantante principal es excelente. Su voz es preciosa y fue un privilegio verla en directo después de haberla descubierto en uno de los vídeos que vi con anterioridad de la gira. La intérprete principal, acompañada por un magnífico coro, y Djawadi pusieron voz y música respectivamente al momento en el que Daenerys libera a los esclavos de Yunkai y ellos la acogen como a una madre mientras la levantan en volandas como si se tratara de una deidad.

Reign: este tema es uno de mis favoritos porque acompaña a uno de los momentos más épicos, por lo menos para mí, que se han visto hasta ahora: la reconquista de Meereen. Después de un exilio forzado con los Dothraki, Daenerys regresa más fuerte que nunca con todo un ejército a sus espaldas y sus tres dragones. Entre todos pondrán orden en la ciudad, aunque sea a base de sangre y fuego.

Hold the door: estamos ante uno de los temas que ilustra otro de los momentos más conmovedores de la serie. La muerte de Hodor y cómo esta se desarrolla dejó a más de uno sobrecogido e impactado. Recuerdo que cuando la vi por primera vez me quedé sin palabras y hecha un mar de lágrimas por todos los acontecimientos que ocurrieron en tan pocos minutos.

Let’s play a game – Bastard: sin duda alguna, estas dos piezas nos vuelven a corroborar una vez más la obra maestra que es la famosa Batalla de los bastardos. La lucha por la recuperación de Invernalia fue un momento histórico en la serie y, ¡por fin!, nos demostró que los buenos también pueden ganar. Todo en ella es perfecto, y la sincronización que hubo entre la orquesta y las escenas, ya que los primeros minutos son íntegros sin resúmenes de por medio, fue impecable.

Light of the seven: si La batalla de los bastardos es una maravilla, Light of the seven es otra obra maestra que relata la gran batalla orquestada por Cersei Lannister sin que esta mueva un dedo. Es magistral y está llena de tensión y sobriedad. Muy Lannister. La puesta en escena fue genial, porque Djawadi fue al centro de la pista a tocar el piano mientras ascendía en una plataforma. Cuando en la serie el fuego valyrio destroza el Septo de Baelor, el compositor quedó oculto tras una explosión y un humo de color verde que simulaba ser el mítico fuego usado por Cersei para salir triunfante.

Winter has come – Hear me roar - The winds of winter: no os podéis imaginar la de veces que he visto el vídeo en el que Djawadi dirige estas tres piezas musicales una detrás de otra, y que se ha convertido en una de mis favoritas. El jueves la vi en directo y no me decepcionó, y fue muy emocionante ya que las tres representan tres momentos cruciales en la serie: Jon Snow es proclamado Rey en el Norte; Cersei Lannister es coronada como la protectora de los Siete Reinos; y Daenerys Targaryen se dirige a Westeros para reclamar lo que es suyo: el Trono de Hierro. Una composición maravillosa que finaliza con Daenerys, toda su armada y sus tres dragones sobrevolando el cielo directos a la guerra.

Después de estas tres piezas, pudimos ver los momentos más impactantes de la séptima temporada, en los que destacaron temas como Truth, Winter is here y The army of the Dead.

Tras presenciar la caída del Muro y a los Caminantes Blancos abriéndose camino, Ramin Djawadi se despidió de nosotros no sin antes volver a tocar el tema principal. Todo el Palau se rindió a su música y despedimos al compositor y a su equipo con una gran ovación y con todo el mundo en pie. Fue una noche mágica que terminó con un In Memoriam que nos mostró a todos los personajes que nos han dejado hasta el momento, y como podéis imaginar fue bastante largo. Todos aplaudíamos cuando uno de nuestros personajes favoritos salía en pantalla, pero los aplausos fueron unánimes cuando Robb Stark apareció, aunque la gran ovación se la llevó el entrañable Hodor. Eso sí también hubo abucheos para personajes como Joffrey, Ramsay o Meñique.

Fue una noche sensacional que disfruté muchísimo ya que fui testigo de un gran espectáculo. Este concierto es un regalo para los fans de la serie, pero también para aquellos que se consideran amantes de la buena música. Juego de Tronos es una historia muy poderosa, y mucha de esta fuerza la transmite su música. Ahora toca esperar a la octava temporada, y si Ramin Djawadi vuelve para mostrarnos en concierto el final de la serie, allí estaré en primera fila.

¡Hasta la próxima!

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Fotografía de la portada: Live Nation