Megalodón (The Meg) (2018)

¡Hola, chic@s! Cuando llega el verano, el cine se llena de grandes producciones que tienen como objetivo entretener al espectador. Tan simple como eso. No tenemos que esperar historias con mensajes profundos que nos hagan reflexionar ya que es muy difícil encontrarlas en esta época estival.  Por lo tanto, el pasado viernes acudí al estreno de una película perfecta para el verano: Megalodón. ¿A quién no le gusta sentir escalofríos cuando nos metemos en el mar pensando que puede haber un lindo animalito esperándonos para atacar?  Nos da miedo pero aun así vamos al cine y vemos este tipo de producciones (en mi caso, vi la película el viernes y me fui a hacer submarinismo al día siguiente. Ole yo). Tiburón era (y sigue siendo) una de mis películas favoritas cuando era niña y Steven Spielberg y John Williams marcaron a toda una generación, y también a las que vinieron después, con su mítico tiburón blanco. Sin embargo, Megalodón hace que veamos a este temible escualo como una dulce sardinita si lo ponemos al lado del enorme depredador que da nombre a la película.

Siempre me han maravillado los tiburones y por este motivo, la historia del megalodón me ha interesado mucho ya que fue el mayor tiburón que nadó en los océanos. Se dice que se extinguió hace dos millones de años, pero algunos barajan la posibilidad de que este depredador siga oculto en las profundidades. Tenía muchas ganas de ver una película con este tiburón como elemento desencadenante de la trama y parece que la Warner Bros escuchó mis suplicas.

La película protagonizada por Jason Statham nos lleva a la parte más profunda del Pacífico, más concretamente a once mil metros de profundidad. Allí reina el silencio y la oscuridad, pero hay un equipo de investigadores que cree que ese tope que marca los once mil metros es en realidad una capa que da acceso a un lugar más profundo… y están en lo cierto. Un submarino consigue traspasar esta capa y descubre nuevas formas de vida nunca vistas antes, pero hay otra que se encuentra allí y que creían extinta. Un enorme megalodón ataca al submarino y  a los ocupantes que se encuentran en su interior, así que los investigadores deciden pedir ayuda al personaje de Statham, pero esta petición resulta un tanto irónica ya que unos años atrás éste afirmó que un horrible monstruo le atacó a él y a sus compañeros, pero nadie le creyó. Ahora, y gracias al submarino, el megalodón consigue traspasar la capa y todo un océano lleno de bañistas y más bañistas se abre ante él. ¡Vaya sueño para este adorable tiburón!

Muchos comparan este film con la excelente Tiburón, pero no hay que hacer esto porque nada podrá igualarla, así que os recomiendo disfrutar de esta cinta porque os lo pasaréis genial. Megalodón no es ninguna obra maestra ni pretende serlo. Es una película de verano para hacernos disfrutar y desconectar, y vaya si lo hace. Me lo he pasado genial viéndola porque combina muy bien los momentos cómicos con los de tensión y suspense y tiene un buen ritmo narrativo. Todos los que estábamos en la sala de cine nos involucramos mucho con la película. Nos reímos, nos pusimos de los nervios y algunos pegaron más de un grito. Es una cinta que juega mucho con ese miedo que tenemos a lo desconocido y cómo esos monstruos que creemos que no son reales en realidad sí lo son.

Los actores cumplen en sus papeles, pero toda la atención está puesta en el megalodón, la gran estrella del film. Con cada aparición suya contenía la respiración porque cuando aparecía nada podía acabar bien. El director, Jon Turteltaub, ha declarado que tuvo que quitar las escenas más sangrientas y de carácter gore para que la película estuviera calificada para todos los públicos, pero si queréis que os diga la verdad no he echado de menos este tipo de escenas porque el megalodón me tenía pegada al asiento.

Si queréis pasar dos horas fantásticas os recomiendo esta película porque os lo pasaréis en grande. Es una combinación perfecta de humor, acción y tensión, mucha tensión. No la comparéis con otras películas de este tipo ni penséis que es una obra maestra porque no le haríais justicia. Simplemente id y disfrutar.

¡Hasta la próxima!

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Fotografías: Warner Bros