Relectura de Mujercitas, de Louisa May Alcott

¡Hola, chic@s! El pasado mes de agosto pudimos ver el trailer de la nueva adaptación de Mujercitas, el clásico de Louisa May Alcott, que ha encandilado a diferentes generaciones desde hace más de un siglo, concretamente desde 1868. Leí por primera vez esta novela siendo una niña, pero este verano quise volver a ella para leerla como adulta y ver si algunos de los conceptos que tenía de esta historia serían diferentes en esta ocasión.

Como muchos de vosotros ya sabréis Mujercitas nos explica la historia de las hermanas March y cómo la guerra ha hecho que no solo pierdan su status social sino también la ausencia de la figura paterna, que se encuentra metido en el conflicto bélico, y no saben si volverán a tenerlo con ellas. A lo largo de un año veremos cómo estas hermanas afrontan su día a día y este vendrá acompañado por situaciones que las harán crecer y madurar.

Esta relectura me ha ayudado a apreciar mucho más la trama y ver que no es tan cándida como la percibí en su día y, por otro lado, que no todo es blanco o negro ya que hay personajes que en esta ocasión he sabido valorar y que en el pasado no lo hice. En la Navidad de 2013 escribí una entrada sobre esta novela y en ella destacaba la figura de Jo March, la heroína de esta historia. Todas hemos soñado con ser Jo porque esta se sale de los cánones establecidos por la época y esto supone toda una revolución. Mi amor por Jo March sigue intacto, pero esta vez he visto que no es perfecta y, que al igual que sus hermanas, tiene virtudes y también defectos. En cuanto a Meg, Beth y Amy para mí siempre fueron secundarias porque estaba enfocada en Jo, pero estas hermanas también deben afrontar su particular viaje personal que les hará apreciar la vida mucho más, y con cada situación que se les plante en el camino sabrán sacar provecho de ella y encararla desde una perspectiva más adulta.

Por otro lado, muchos tachan a Mujercitas de tener una trama simplona, pero yo no lo veo así. En el siglo XIX las mujeres estaban en un segundo plano porque la figura principal era la masculina y ellas dependían de este. Cuando era niña leí una historia de cuatro hermanas que nos contaban su día a día, pero esta vez he visto a cuatro jóvenes que luchan para salir adelante y consiguen hacerlo con todas sus dificultades, y esta experiencia les da fuerza, humildad e independencia. Dependen de ellas mismas y finalmente salen vencedoras. Uno de los momentos que más me han gustado es cuando Marmee, la matriarca, le dice a sus hijas que lo importante no es el dinero ni encontrar un hombre con el que pasar sus vidas sino encontrar la felicidad con una misma. ¡Bravo!

No recuerdo la edición que leí hace años, pero esta versión de Alfaguara con ilustraciones de María Hesse me ha gustado mucho. No obstante, mi único pero a esta edición es que no contiene la segunda parte (siempre he querido leer la famosa escena entre Laurie y Jo), pero ya le he puesto remedio encargando la versión de Lumen que contiene ambas entregas y además de esto, también nos regala la versión no censurada. Y si hablamos de censura, a lo largo de los años la novela ha sufrido modificaciones para restarle momentos reivindicativos y dar paso a una trama mucho más dulce y conformista. Espero que con la edición de Lumen pueda ver todo lo que se nos ha negado durante estas décadas.

Mujercitas es una novela que recomiendo ya que nos regala una historia preciosa sobre cuatro hermanas muy distintas que se abren paso al mundo y, aunque este no suela ser amable, aprenderán de cada paso que den y esto las ayudará a crecer. En unos meses os traeré la reseña de la edición de Lumen, y para los que estén esperando (como yo) la nueva adaptación cinematográfica que se estrena el 25 de diciembre, os recomiendo revisionar la versión de 1994 con Winona Ryder, y que es mi favorita.

¡Hasta la próxima!

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