Mi historia con Las chicas Gilmore



¡Hola, chic@s! La entrada de hoy es muy, pero que muy especial ya que está dedicada a Las chicas Gilmore, mi serie de cabecera junto con la mítica Friends. Cuando se anunció su vuelta gracias a Netflix empecé a pensar que, obviamente haría una entrada hablando de los nuevos episodios, pero quería hacer algo más. Así que pensé que podría recoger diferentes testimonios de fans de la serie para que me explicaran sus experiencias con ella y plasmarlas todas en una entrada. Al principio pensé que sería imposible, pero al final mi ilusión se hizo realidad. La familia de blogger (y lo que no es blogger) se ofreció a colaborar y hoy os traigo ocho relatos dirigidos a los habitantes de Stars Hollow. Las historias que vais a leer a continuación vienen de diferentes puntos de España,  ¡y una directamente de Lyon! Así que coged toda la comida china e india, las pizzas, los tacos, las chucherías y el café que tengáis y prepararos para leer las historias de las otras chicas Gilmore ;) Este es nuestro pequeño homenaje. ¡Muchas gracias a todas!



Debo admitir que no fui una seguidora demasiado fiel de Las chicas Gilmore la primera vez que la echaron por televisión. Vi algunos capítulos sueltos pero, como en casa a mis padres y hermana no les llamaba la atención, tuve que conformarme con ver algún capítulo suelto cuando estaba el televisor libre. Sin embargo, internet dio rienda suelta a mi adicción por esta madre e hija con las que tanto me he emocionado y reído. Siempre me quedó la espinita de no haber podido disfrutarla de manera continuada porque los capítulos que sí pude ver me gustaron por el poderoso carácter de Rory y Lorelai y porque me parecía una serie amable, que me hacía sentir arropada. Algo parecido a lo que me hizo sentir Everwood o Felicity. Además, en el caso de las Gilmore, me sentía superidentificada con Rory, cómo no, por fin una protagonista rata de biblioteca como yo (desde Bella de La Bella y la Bestia no había visto ninguna), aunque he de confesar que en mi vida no ha habido ningún Dean. Por ello, supongo, mi personaje favorito siempre será Rory, aunque suene algo típico o incluso pretencioso. Supongo que me hizo darme cuenta de que estaba bien ser aplicada y leer sin parar, algo que, en mi día a día, solía ver como una carencia o "vicio" estando como estaba rodeada de gente cuyos únicos intereses eran salir de fiesta y aprobarlo todo estudiando en el último momento.

Por otro lado, otro de los motivos por los que me gustan tanto Las chicas Gilmore es el que más o menos he enunciado más arriba: me hacen sentir segura, es una serie que me resulta muy agradable de ver (y volver a ver cada cierto tiempo); al haberlas visto en un momento en el que realmente "las necesitaba" se han quedado en mi memoria como momentos en los que me cuidaba y disfrutaba sin cuestionarme nada, simplemente disfrutando de sus aventuras. Por todo ello, asocio a la serie una mantita y una buena taza de chocolate o leche caliente. Además, solía hacer maratones los viernes por la noche con mi portátil en la cama, y la primera vez que las vi fue más o menos por estas fechas, de ahí que las asocie con manta y una bebida caliente.

Por último... solo espero que mantengan el espíritu de las Rory y Lorelai que conocimos y amamos, que no metan la pata haciendo que estos años transcurridos las hayan cambiado por completo porque, sinceramente, perderían toda la gracia. Ah, y quiero ver a los niños de Sookie, a ver si alguno ha salido igual de gracioso y patoso que ella!!


Fuente: www.bustle.com



Siempre me ha gustado la serie por su frescura, por no ser la típica que sabes cómo acabará porque tiene tramas que no ves en otras. El hecho de que dos mujeres sean las protagonistas y muestren esa independencia, también me ha gustado mucho. Y como no, esos pequeños detalles que te hacen sentir bien al verla: el cantante callejero con música divertida, el pueblo cotilla (de forma positiva) a la vez que especial, la vida de las protagonistas que tanta curiosidad me ha causado siempre, el entorno, los colores,... todo me atrae de la serie. Es realmente una de mis favoritas. 
La descubrí gracias a mi hermana, una cinéfila de los pies a la cabeza, en sus noches de series. Me gustó esa frescura de la que hablaba antes y me incitaba a seguir viéndola. Recuerdo que la primera imagen que vi fue cuando la madre de Lorelai va a casa de las chicas a pasar la noche porque se va a casar de nuevo con su marido (padre y abuelo de las protagonistas), vienen el resto de mujeres de la serie y se emborracha.
Mi personaje favorito es difícil de decir. Todos aportan algo que hace de la serie algo genial. Realmente, no tengo un favorito/a.
Espero que los cuatro capítulos me expliquen qué ha sido de sus vidas, como han madurado y quiero saber si realmente cuando acabe me quedaré satisfecha con el desenlace, que supongo es algo que todos estamos esperando. 


Fuente: eonline.com


Haciendo memoria pienso que la primera vez que vi Las chicas Gilmore echaban la serie por la 2. Fue una absoluta casualidad y me conquistó al instante su espontaneidad, las situaciones surrealistas que viven, los diálogos a toda velocidad... No se parecía a nada que hubiese visto antes y desde aquel primer momento comencé a esperar con muchas ganas el siguiente capítulo y el siguiente y el otro y el otro... Vamos, que estaba... ¡absolutamente enganchada!

Casa semana me atrincheraba ante la tele con la seguridad de que iba a disfrutar muchísimo de la nueva y loca historia que me llevase a Stars Hollow. Apuesto, y seguro que no pierdo, que todos los que vivimos en la Gilmore manía hemos soñado, más de una vez y de dos, con caminar por sus calles, ir a la cafetería de Luke, a la posada de Sookie y Lorelai o a esas fiestazas que montaban en la plaza, casi siempre además temáticas (¿recordáis el laberinto de heno?), y que eran una gozada. Además hay que contar con muy buen guión (lleno además de referencias estupendas a películas, música y libros) y actores a la altura para que las personalidades e interpretaciones de esos vecinos tan excéntricos y geniales no se viesen sobreactuadas o cayesen en el error de parecer más bien caricaturas. ¡Y vaya si lo logran!

Estos días he estado, felizmente, en el mundo Gilmore un montón de tiempo para estar preparada para el anhelado estreno de los nuevos capítulos y he comprobado lo bien que ha envejecido la serie. No puedo decir lo mismo de todas, muchas cuando la vuelvo no me gustan en absoluto, pero esta la he disfrutado de lo lindo. No ha perdido nada de frescura, ni de chispa.

Me he vuelto a reír a carcajadas con las salidas de tono de Lorelai y con los confusos inicios de su relación con Luke, a sentir pena por Max Medina y su no boda (él era ainsss), a emocionarme con el capítulo en el que con flash backs recuerdan el nacimiento de Rory, a disfrutar de la primera noche en la universidad que Lorelai pasa con su hija... Tantos y tantos que hacen que esta serie sea muy muy especial.

Pero me voy a quedar con uno como homenaje a toda esta maravillosa gente devora libros que el mundo blog me ha permitido conocer: Rory está preparando la mochila para ir a clase, pero no ve manera de que le quepa todo lo que tiene que llevar porque a los apuntes y demás tiene que sumar una biografía que está leyendo, pero quizás no le apetezca la leer la vida de una persona así que debe cargar también con algo de poesía, pero no siempre es momento para poemas, así que una novela clásica no estaría mal, pero ummm puede que no apetezca en cierta ocasión, así que hay que añadir algo de contemporánea... Nadie mejor que una súper lectora como Rory para poner en imágenes nuestra vida de locos, y orgullosos, apasionados de la lectura. Y es que las Gilmore ¡son únicas!


Fuente: Gilmoregirls.wikia.com


Las chicas Gilmore es una serie que me ha aportado tantas cosas que me cuesta encontrar las palabras para describir lo que siento por ella. Tengo muchas series de adolescencia, pero hay dos que se llevan la palma, una es Buffy Cazavampiros, la otra, Las chicas Gilmore. La primera no me he atrevido a revisionarla aún, la segunda no he dejado de hacerlo nunca.

Es una serie que ha crecido conmigo, unos personajes que forman parte de mi vida de tal manera que no puedo evitar enfadarme y enamorarme de ellos como si fueran personas reales. 
Mucha gente sueña todavía con su carta de Hogwarts, en cambio yo mataría por un fin de semana en Stars Hollow.

Me tomaría un delicioso y contundente brunch en el Dragonfly de la mano de Sookie, comería y tomaría mi café en Lukes, de tarde me iría a un concierto de la banda de Lane y la cena sin duda sería de invitada especial en la mansión de Emily. Ya la noche la pasaría felizmente viendo pelis hasta las tantas de la mañana y comentándolas con Lorelai y Rory.

Ese sería un día perfecto para mí. Hasta ese punto me gusta esta serie. Y reconozco que tiene sus altibajos (los alti protagonizados por gente como Luke, Lorelai, Jess, Paris, Michel o Emily Gilmore, mientras que los bajos tienen más que ver con Dean, Logan o Jason entre otros...), pero eso no quita que esta sea la mejor serie para reír y relajarte ante el sofá.

Una serie entrañable y divertida que jamás pasará de moda y que desde luego seguiré revisitando siempre que me sienta con ganas de reencontrarme con estos viejos amigos o esté necesitada de un buen subidón de ánimo.



Fuente: buzzfeed.com

Alice Vázquez

Hace unos años salió una serie llamada Bunheads y como la temática principal era el ballet obviamente me puse a verla. Resultó ser una de esas series que solo puedo describir como "bonita" y "feliz", así que me encantó y, por supuesto, una o dos temporadas después la cancelaron. 

El caso es que recordé que normalmente en los comentarios de esa serie comentaban que la guionista (o productora, no sé) y uno de los personajes eran las mismas que en Las chicas Gilmore. Aunque no la hubiese visto la serie me sonaba muchísimo, y tras investigar un poco la reconocí como aquella de la cual había visto capítulos sueltos en alguna de mis mañanas de campanas universitarias. Decidí ver el primer capítulo, y la lié.

Digamos que engancharse es poco. A parte de enamorarme de la relación de Lorelai y Rory muy muchísimo, del gusto y obsesión musical de Lane, la constante mención a libros, películas, series... me obsesionaron los diálogos. La asociación de ideas, el ritmo, y el maravilloso e inteligente humor de los personajes. Simplemente me parecieron la perfección.

Los personajes, por supuesto, son tan terriblemente divertidos como interesantes y, por tópico que sea, sin duda me quedo con Rory y Lorelai, pero especialmente con esta última. Pese a no estar de acuerdo con la mayoría de sus decisiones (lo cual también es aplicable a Rory, sobre todo tema de chicos, por dios, relaciones sanas anyone?) me parece una mujer increíble y digna de admirar. Me encanta su lucha por, no solo sacar adelante a su hija, sino hacer todo lo posible para que lo haga con todo aquello que le permita explotar su potencial. También es una mujer emprendedora, que persigue sus sueños de abrir su propio hotel junto con Sookie. Y todo esto ella sola pues, si bien siempre tiene algún hombre en su vida o al menos en su cabeza, la ausencia de uno no hace que sus fuerzas flaqueen ni un instante. Bueno, quizás un par, pero no muchos más. 

La idea del revival me tiene en ascuas. Si bien me da un poco de miedo, porque a veces estas cosas salen catastróficamente mal, la serie dejó demasiados temas abiertos, y me encantará ver qué ha pasado con todos los personajes durante estos años. Y sobre todo, sobre todo, tengo ganas de escuchar todo lo que Lorelai tiene que decir, que nunca es poco.


Fuente: eonline.com

LittleEmily

Recuerdo perfectamente la primera vez que vi a las Gilmore. No la primera vez que vi un capítulo entero si no la primera vez que vi a Lorelai, Rory y el Café de Luke. Era un anuncio de una noche de series que programaba La 2 donde emitían alguna otra serie que ahora no recuerdo. Las chicas Gilmore era la última y por esas fechas me parece que yo todavía iba al instituto así que no podía verla. La pude ver cuando la pasaban por la tele aunque no recuerdo en qué franja, ni cuando era ni qué día me senté delante de la tele para verla. Me suele pasar con casi todas mis series favoritas así que no le doy importancia. Lo único de lo que estoy segura es que en aquel capítulo, Rory todavía iba a Chilton y ya había aparecido Jess. 

Y en cuanto la vi, me enamoré. Las chicas Gilmore ha alegrado mañanas vacías de clases universitarias, tardes aburridas y largas noches de maratones (breves) no planeados. La asocio al piso donde pasé mi infancia y adolescencia, con una cama, estanterías y cajones repletos de libros como los de Rory. Y también a la casa donde vivo ahora, a tardes de biblioteca, de estudio de oposiciones, a horas muertas entre lecturas, a risas solitarias (desgraciadamente, nadie en mi familia ha conectado con su humor). Me tocaba reír sola hasta que, gracias a Internet y a los blogs, descubrí que no era la única fan por estos lares. Y acabé encontrando un pequeño grupo con el que comentar los diálogos de Lorelai, hablar de cuál es el mejor novio para Rory, de criticar a Emily, de sorprendernos con las rarezas de Kirk o de tener ganas de achuchar a Sookie. 

Pero, al margen de todas las grandezas de la serie, quizá lo que más me conquistó fue Rory. Vete a saber por qué, muchos se quedan antes con Lorelai o con cualquier otro personaje que con la benjamina de las Gilmore. Cualquiera que me conozca sabe de mi amor por los libros pero imagino que la voracidad lectora ayuda aunque no es suficiente para explicar el cariño que le tengo. Supongo que Rory representa una parte de mis sueños, mi admiración por la vida universitaria americana (aunque SPOILER no me gustó nada que después de adorar Harvard media vida, acabara decidiéndose por Yale), algunas de mis relaciones personales y frustraciones. Sin mencionar la afición al cine y la música triste... Supongo que hay un mucho de Rory en mí y me gustaría que fuera una persona real, una amiga, con la que charlar sobre libros, películas y la vida mientras rebuscamos entre cajas de libros un sábado cualquiera en Stars Hollow. 

Y todavía no he mencionado Stars Hollow. Hay zonas del mundo que me enamoran (además de Inglaterra) y una de ellas es la costa noreste de Estados Unidos. Pienso que podría instalarme a vivir en cualquier momento entre sus adorables y a la vez, pesados vecinos, capaces de montar reuniones sobre detalles inverosímiles. Lo más probable es que huyera despavorida de ellos al estilo Luke, a pesar de mi aversión al café y que le pediría té en grandes dosis. Y si él no supiera, entraría detrás del mostrador, para enseñarle a preparar uno. Al fin y al cabo, "vas a tenerme que preparar muchos". Y en una taza de café gigante, por favor. Preparada para la octava temporada. 

Fuente: justjaredjr.com

¡Hola a todos!

Hace ya varias semanas, Laura se puso en contacto conmigo para invitarme a participar en este homenaje a Las chicas Gilmore y, como podréis imaginar, me fue imposible negarme. Me dijo que tenía que responder a una serie de preguntas, véase: ¿cómo conociste la serie? ¿qué te gusta de ella? ¿cuáles son tus personajes favoritos? ¿qué recuerdos asocias a la serie? y, para terminar, ¿qué esperas de su inminente revival?

Cómo no quiero enrollarme en los preliminares, aquí van mis repuestas y un gracias enorme a Laura por permitirme participar :)

Veamos (aquí me pongo en modo abuelita batallitas), conocí a Las chicas Gilmore en septiembre del año 2007. Lo recuerdo perfectamente porque por aquel entonces acababa de mudarme a Aix-en-Provence para cursar mi tercer año de licenciatura. Compartía un piso desvencijado del centro de la ciudad con tres compañeras y, muy pronto tomamos la costumbre de ver series, tiradas en nuestro sofá-cama. Revisionamos capítulos de FriendsSexo en Nueva York y el anime La familia crece, empezamos a ver la recién estrenada Gossip Girl...y en mi caso, realicé un descubrimiento tardío que resultó ser la SERIE con mayúsculas, Las chicas Gilmore. Vi el primer capítulo en aquella famosa página de series y películas piratas y ya no hubo vuelta atrás. En apenas tres meses devoré la serie entera y, cuando llego diciembre, tuve claro el regalo que pediría esa Navidad, el pack completo de la serie para verla una y otra vez.

Que puedo deciros, nunca antes había experimentado esa conexión con una serie de televisión; es cierto que me encantaban Sexo en Nueva York y Friends, pero como Las chicas Gilmore no hubo ni habrá para mi otra serie de televisión. Básicamente me gusta porque reúne todo lo que me es precioso e imprescindible en la vida. Una casa compartida con los que quieres, relaciones de amistad y camaradería, un ambiente agradable donde vivir...no necesitaría mucho más para encontrar mi lugar ideal en el mundo y, Stars Hollow lo tiene todo.  

Adoro el reparto, caricatural en apariencia pero complejo en el fondo; ese tipo de gente decente con el que te gustaría cruzarte en el día a día; adoro los sentimientos y emociones que enfrentaban en cada capítulo y que resonaban con mis propias experiencias. Las descripciones de la vida cotidiana, la observación minuciosa de las relaciones familiares y, como no, la preciosa relación madre-hija, que tanto me recuerda a la mía con mi madre. 

Adoro las Chicas Gilmore por las continuas celebraciones y decoraciones de Stars Hollow, por el café, por la comida: la cesta de Sookie en la subasta, la maratón de cenas de Acción de gracias, la cena de Bracebridge, los desayunos en Luke's...porque pese a la imagen de inocencia, de candor y de buenos sentimientos que transmite la serie, también hay espacio para la observación de las clases sociales, de la tradición y las convenciones frente a la libertad personal.

He perdido la cuenta del número de veces que he visto la serie desde aquella primera vez en 2007. Cuando pienso en sus personajes los siento como de mi propia familia y por eso me resulta dificilísimo escoger unos favoritos. Los quiero a todos, desde las chicas protagonistas hasta la arpista desagradable del Independence Inn, pasando por Gypsy la mecánica, el gato Caribe y Paul Anka el perro de Lorelai. Pero si me viese obligada a elegir estos serían mis personajes imprescindibles en riguroso orden: Lorelai, Luke, Rory, Jess, Sookie y Paris

En cuanto a los recuerdos que asocio a la serie...¡dios mío, demasiados! Empecé a verla en medio de mis estudios universitarios. Época de miles de cambios en mi vida, de mis primeros pasos hacia la independencia. Primera vez que me separaba de mi familia, nuevas amistades, amores, retos académicos, viajes...¡me sentía tan, tan identificada con Rory! Recuerdo las tardes con mi madre, viendo la serie mientras comíamos marranerías, riendo y llorando al ver lo mucho que nos parecíamos a Lorelai y a Rory (mi madre la cabra loca y yo la voz de la razón y la conciencia); recuerdo ver la serie con mi mejor amiga, odiando a Logan con todas nuestras fuerzas y muriendo de amor al ver reaparecer a Jess en aquel capítulo mítico en el que le abre los ojos a Rory. Recuerdo escuchar en bucle la música de Sam Phillips, cantautora que descubrí gracias a la serie y que se ha convertido en una de mis favoritas; recuerdo utilizar frases de la serie y reconocer a un Gilmore adicto cuando descubría al azar la referencia (el "huele a nieve" de Lorelai nunca falla).

Después de todas estas muestras de cariño supongo que comprenderéis lo emocionada que estoy ante la inminente vuelta de "las chicas". Ya había perdido toda esperanza de que se retomara el proyecto y cuando me enteré de su confirmación casi lloró de alegría, os lo prometo. ¿Qué espero de él? Pues en realidad nada, nada en absoluto. No tengo expectativas, no me importa cómo vaya a acabar, ni el enfoque que le hayan dado a la vida de las chicas. Me conformo simplemente con volver a vivir un año más en Stars Hollow, con verlas hablar como cotorras aceleradas e inteligentes una vez más, por supuesto, taza de café en mano. Sea como sea, el final de la serie será perfecto, porque al fin descubriremos esas cuatro palabras que Amy Sherman-Palladino pensó desde el principio como  broche de oro de la serie. 

Stars Hollow ¡nos vemos en pocos días!

Firmado: Marie, xxx



Laura

Y para acabar esta entrada tan especial, os dejo aquí mi historia con la serie. Mi romance con las maravillosas Gilmore no empezó con buen pie, ¡y todo es debido a Emily y Richard Gilmore! Recuerdo que mi primer contacto con la serie fue a través de La 2 una noche en la que me encontraba haciendo zapping porque no daban nada bueno por la tele. Cuando mi mando llegó a este canal vi a los padres de Lorelai teniendo una conversación de lo más pomposa y pensé lo snobs que eran esos dos. Obviamente cambié de canal porque no me gustaron nada. Sin embargo, la cosa, por suerte, no acabó ahí ya que a los pocos días volví a encontrarme con la serie pero en esta ocasión pude ver escenas de Lorelai y Rory en Stars Hollow y ahí el chip cambió por completo. Sin darme cuenta, cada semana acudía a la habitación de mi abuelo porque tenía una tele pequeñita (ahí podía ver lo que yo quería ya que mis padres veían otras cosas y podía quedarme en el cuarto de mi abuelo hasta que éste se acostara) y allí conseguía escapar de la rutina cuando aterrizaba en Stars Hollow. Cada vez me gustaban más las historias y me fastidiaba bastante que mi abuelo decidiera irse a la cama a mitad de un capítulo ya que eso significaba que no podía ver el final. Por aquel entonces no tenía internet en casa, así que mi seguimiento de la serie no era muy fiel. Dependía de las circunstancias, es decir, si mi añorado abuelo decidía irse a dormir temprano me quedaba sin episodio, pero si se entretenía con cualquier cosa tenía la esperanza de verlo entero. Sin embargo, esta situación cambió cuando internet, ¡la salvación para muchos cinéfilos!, entró en casa y cada noche descargaba varios episodios de la red para acto seguido grabarlos en un pen y verlos cuando quisiera. Vi la serie entera en pocas semanas. Esto ocurrió hace más de diez años y a día de hoy mi idilio con esta serie sigue intacto.

¿Por qué me gustan Las chicas Gilmore? Para mí esta serie es como un abrazo cuando lo necesitas. Es tan acogedora y cálida, que es imposible no caer en sus redes. Es muy complicado describir lo que siento cuando Lorelai, Rory y compañía aparecen en pantalla. Es una serie que me hace sonreír, llorar y volver a sonreír. Sus guiones están llenos de ingenio, rapidez y adoro que esté lleno de referencias culturales y que la literatura tenga un lugar destacado. Es una serie que tiene ángel, carisma, y creo que uno de sus puntos fuertes está en el tipo de historia que cuenta. Nadie apostaba (y apuesta) por una serie de estas características en las que las protagonistas son una madre y una hija ya que no es lo que suele llamar la atención de la audiencia. Se arriesgaron y salieron ganando. ¡Menos mal que apostaron por ella!

Los personajes que aparecen en la serie son una maravilla. Están llenos de carisma y me resulta imposible escoger solo a uno. Lorelai y Rory, obviamente, son muy especiales ya que son dos mujeres fuertes e independientes que pueden convertirse en un modelo a seguir para más de una persona. Empecé la serie teniendo más o menos la misma edad y personalidad de Rory y ahora me estoy acercando peligrosamente a la edad con la que Lorelai empezó la serie y cada vez me parezco más a ella. Ha sido una progresión natural. Muchas de mis conversaciones están llenas de referencias a libros, películas o series y a veces la gente no me entiende mucho ja,ja,ja.¡El espíritu Gilmore se ha instalado en mí y no me deja! Con Rory he tenido mis más y mis menos, especialmente durante las dos últimas temporadas, pero durante mi último visionado, me he reconciliado con ella. Con respecto a Lorelai, aunque en algunas ocasiones no estaba de acuerdo con sus decisiones en cuanto al amor respecta, no puedo evitar sentir una gran admiración hacia esta mujer ya que es una todoterreno y una gran luchadora. Se ha hecho a sí misma y ha conseguido muchísimas cosas empezando de cero. En la serie hemos escuchado muchas veces lo especial que es Rory, pero yo creo que la realmente especial es Lorelai ya que representa el esfuerzo, el trabajo y la fuerza y esta mujer es digna de admirar.

En cuanto a los secundarios… ¡ay, qué sería de la serie sin ellos! Son tan excéntricos, cotillas y metepatas que no puedes evitar sentir amor a primera vista por cada uno de ellos. Podría hablar de todos ellos pero no acabaría nunca, aunque reconozco que Paris Geller, la amiga tocapelotas de Rory se ganó mi corazón. Muchas veces tenía ganas de decirle cuatro cosas, pero por otro lado, no pude evitar simpatizar con ella por ser la típica antagonista cómica que oculta un gran corazón, aunque tengas que escarbar mucho para encontrarlo, y que lo único que busca es un amigo en el que poder confiar. A lo mejor algunos me matan si digo esto pero siempre encontré a Paris más interesante que Rory ya que ésta última era retratada como una chica perfecta y dulce, llena de bondad y buenas intenciones y Paris era una versión de Rory pero con más mala leche y esto la hacía mucho más compleja y divertida.

Si hablamos de recuerdos, inevitablemente pienso en mi hermana. Recuerdo que cuando veía los episodios que tenía en el pen al principio lo hacía sola, pero luego mi hermana me fue acompañando hasta quedarse definitivamente. Éramos dos adolescentes que no parábamos de comentar los episodios mientras los veíamos y ahora, casi una década después, somos dos mujeres que siguen sentándose juntas para seguir viendo los episodios, en esta ocasión gracias a nuestro pack de DVDs, y reír y emocionarnos como el primer día. Por ejemplo, este verano nos entró a las dos la risa tonta cuando vimos el episodio en el que se organizaba una maratón de baile de 24 horas y en un momento determinado todos los asistentes tenían que parar de bailar y dar vueltas a la pista. Es una escena que ya habíamos visto antes, pero hay series que siguen sorprendiéndote como el primer día. Y luego está Kirk, pero bueno él es un caso aparte.

Para acabar esta entrada, os confesaré que he estado viviendo con mucha emoción estas semanas de espera. Siempre que salía un tráiler o una imagen nueva me emocionaba como una niña pequeña. Tengo muchas ganas de ver el revival y solo pido dos cosas: por un lado, que la serie mantenga el nivel y no pierda su esencia y por otro, que a este regreso se le dé un final satisfactorio. El final de la serie original lo viví más como un final de temporada y no de serie y en este sentido, siempre tuve una espinita clavada ya que sentí que se podría haber hecho mucho más y el desenlace me pareció un poco frío y precipitado. Espero que se haga justicia y me muero de ganas por descubrir cuáles son las cuatro palabras finales.

Bueno chic@s, ésta ha sido mi historia. Quiero agradecer una vez más a mis compis de blog, de trabajo y a mi hermana por haber participado en esta entrada. Ya queda nada, de hecho unas pocas horas, para que en Stars Hollow se vuelva a levantar el telón y volvamos a ver a todos sus entrañables habitantes.

¡Nos vemos en Luke's!


Si queréis acceder a mi página de Facebook podéis hacer click en este enlace

Imagen principal: tvline.com


Comentarios

  1. Cómo ha gustado leer las historias de todas con las chicas Gilmore! Me ha hecho recordar momentos como el maratón de baile que además fue donde Jess y Rory explosionaron. Lo que más me gusta es que para todas ver la serie es como el hogar, nos hace sentirnos bien, nos diverte y también nos emociona. No es fácil lograr eso, lo que demuestra que estas chicas son muy muy especiales.

    Gran trabajo Laura por ponernos en marcha y reunirnos, bravo por ti!! Y la historia con tu abuelo me ha encantado, lo hace aún más especial! Un besote!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola, guapa!

      Ay, muchas gracias por tus palabras!! Podrían haber sido muchos más relatos, pero por diferentes motivos no han llegado a tiempo...

      Reconozco que me entró la nostalgia cuando escribí sobre mis peripecias para poder ver la serie ya que mi abuelo en eso tenía mucho que ver ;)

      ¿Has visto ya el revival? Yo lo vi el sábado y ya tengo escrita la review. La publicaré esta semana :)

      ¡Un besazo enorme!

      Eliminar
  2. Qué bonito ha sido participar en este proyecto, Laura! Menos mal que al final no se me fue el santo al cielo y pude enviártelo jajajaj
    Ha sido genial leer todas las experiencias de las demás, está claro que es una serie muy especial para todas y que desde luego nos ha marcado! Acabo de leer tu entrada sobre la temporada final y estoy muy de acuerdo. Lo pasé muy mal con la involución de Rory como personaje :( pero en general he vuelto a disfrutar de las chicas como siempre :)
    Un bsote!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola, Almudena!

      Me hizo mucha ilusión que participaras. ¡Muchísimas gracias! Ha sido genial poder leer vuestras historias porque me he sentido muy identificada.

      Qué pena lo que han hecho con Rory. Espero que hagan más capítulos para encauzarla porque esto no puede ser.Pero por otro lado, y como bien dices, fue genial volver a Stars Hollow :)

      ¡Un besazo!

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares