Especial Halloween: La noche de Halloween (2018)

¡Hola, chic@s! En 1978, el maestro John Carpenter consiguió aterrorizar a todos aquellos que se atrevieron a ver La noche de Halloween, una pequeña película que disfrutó de un éxito arrollador y que ha conseguido superar el paso del tiempo. Con ella nació una de las grandes franquicias del género slasher (con siete secuelas y dos precuelas) y la figura de Michael Myers, el famoso psicópata de esta historia, se ha reivindicado como un gran icono del cine de terror. En este 2018 que está a punto de acabar se cumplen 40 años del estreno de esta mítica película y para celebrarlo Carpenter y Jamie Lee Curtis se han vuelto a reunir para traer de nuevo a la vida a Michael Myers con el objetivo de aterrorizar a una nueva generación. En esta ocasión, la película que se ha estrenado esta semana en los cines, y que se llama igual que la cinta original, es una secuela directa de la primera. Por lo tanto, debemos olvidar las secuelas que vinieron después porque parece ser que ya no forman parte del canon y por mi parte apoyo este movimiento porque creo que muchas de estas perdieron el rumbo.

La noche de Halloween (2018) nos enseña cómo Michael ha pasado los últimos 40 años de su vida encerrado en psiquiátrico y aunque esto es sinónimo de calma y tranquilidad, Laurie Strode (Jamie Lee Curtis) no piensa lo mismo porque desde que Myers intentó matarla no ha vuelto a ser la misma. Está convencida de que Michael volverá y por eso ha estado preparándose toda la vida para un nuevo reencuentro. Su familia la ve como una paranoica, pero sus miedos se confirman cuando Michael consigue escapar de su eterno internamiento. A partir de aquí una nueva oleada de crímenes y terror tendrá lugar y esta alcanzará su punto más álgido cuando Myers y Strode vuelvan a enfrentarse cara a cara.

Esta nueva entrega ha arrasado en su primer fin de semana en Estados Unidos y no me extraña ya que esta secuela cuenta una historia muy digna y recupera el espíritu de ese cine de terror de los ochenta que tanto me gusta. La noche de Halloween me ha gustado mucho porque es una cinta que te mantiene en tensión en todo momento. No sabes por dónde va a salir Michael (o tal vez sí, por eso estamos tan inquietos) y esto te obliga a no bajar la guardia en ningún momento. Los personajes están muy bien escritos y las actuaciones son notables. No decepciona en absoluto y es una muy buena película para ver la noche del 31 de octubre. A continuación, os dejo los puntos más destacados de la película protagonizada por Jamie Lee Curtis.

Michael Myers

No se puede hablar de Halloween sin nombrar a Michael Myers. La figura de Myers nos provoca tanto miedo porque es real. Este representa a un monstruo que nos podemos encontrar en cualquier momento y vemos a muchos de ellos a diario en los medios de comunicación. Sin embargo, y a pesar de lo que acabo de decir, su personaje también representa nuestros miedos más irracionales. Myers encarna la figura del hombre del saco, un monstruo creado para asustar a los más pequeños por la noche, y este sale de nuestras pesadillas para materializarse. En teoría es una persona de carne y hueso, pero es muy difícil acabar con él. Por este motivo, parece que posee características sobrenaturales ya que es prácticamente inmune a todos los ataques que se ejercen sobre él. Por eso se le ve como el hombre del saco ya que a los monstruos no se les puede matar. Son eternos, indestructibles, y siempre están al acecho para sembrar el caos y el miedo. La máscara que lleva siempre con él, otro icono en toda regla, representa nuestro miedo a lo desconocido, a no poder acceder a la verdad, y Myers consigue esto muy bien ya que la máscara no nos permite ver su apariencia más humana y solo nos deja visualizar la más monstruosa y aterradora. En esta nueva entrega el antagonista de la historia ha evolucionado y ahora es mucho más letal y sádico que en su predecesora. Los crímenes cometidos en la primera Halloween no son nada comparados con estos.

Un trío femenino de lo más potente

Laurie Strode se convirtió en todo un referente de las películas slasher, pero en esta ocasión no está sola ya que la acompañan su hija Karen (Judy Greer) y su nieta Allyson (Andi Matichak). Las tres son perseguidas por Michael, y a pesar de ser las víctimas, le plantan cara a su acosador. De la desesperación consiguen reunir el suficiente valor y coraje para poder ejecutar su plan y salirse con la suya. Me ha gustado que la película haya retratado a tres mujeres fuertes y es inevitable ver en ellas un canto al feminismo.

La banda sonora

Cuando hablamos de Halloween inevitablemente también hablamos de su tema principal. Esta nueva entrega rescata esa mítica música porque sin ella la película no sería la misma. La siniestra sintonía que me pone los pelos de punta es Michael Myers, forma parte del personaje, está ligada a él y si no estuviera la historia perdería parte de su identidad y fuerza. Cuarenta años después la banda sonora de Carpenter vuelve a ser sinónimo de peligro y horror. No ha perdido para nada ese poder de angustia que ejerce sobre el público. Una obra maestra.

Continuos homenajes

Esta nueva entrega es un continuo homenaje a su predecesora. Curiosamente vi la cinta original ayer y por eso la tengo tan fresca en mi memoria, lo cual me ha ayudado a ver de manera más clara todos los guiños que la secuela le ofrece al espectador. Sus homenajes despertarán una sonrisa a la audiencia debido a la nostalgia que estos producen.

La noche de Halloween es una película que he disfrutado mucho porque consigue meterte de lleno en la historia. La figura de Myers produce fascinación y terror a partes iguales y siempre es un placer volver a ver en la gran pantalla a toda una leyenda del cine de terror. Myers está en plena forma al igual que Laurie Strode, una heroína y un villano que están más conectados de lo que les gustaría admitir. Por lo tanto, si queréis vivir una orgía llena de horror, esta cinta cumplirá de manera notable vuestro propósito.

¡Hasta la próxima!

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Fotografías: Spinof, Blumhouse