Virginia Woolf, Dardos de Papel








¡Hola a tod@s! Desde el mes de abril hasta la semana pasada me he dedicado a los estudios, pero ha habido una autora que me ha acompañado en mis escasos ratos libres y esa autora ha sido Virginia Woolf.

De Virginia Woolf he leído muy poco. Lo primero que leí de ella fue Londres, hará ahora tres años, y no volví a ella hasta hace dos meses cuando decidí coger de la biblioteca Dones i literatura: assaigs de crítica literària (Mujeres y literatura: ensayos de crítica literaria) y Dardos de papel, libro del que os voy a hablar a continuación.

¿Quién no ha oído hablar de Virginia Woolf? He leído muchos artículos relacionados con su trabajo y de lo excepcional que era y sigue siendo esta autora y mujer. Recuerdo haber visto muchas fotografías suyas y siempre recuerdo que no sonreía. Esto tuve un efecto en mí ya que me la imaginé como una mujer seria, fría e inaccesible. Sin embargo, la imagen que había creado de ella ha resultado ser muy diferente de la realidad.

Dardos de papel es una recopilación de cartas que Virginia Woolf fue enviando a sus más allegados a lo largo de su vida y en ellas se puede descubrir la cara más personal de esta autora. Reconozco que ha sido un descubrimiento maravilloso ya que ha desmontado por completo la imagen que tenía de esta escritora. He visto su parte humana, una parte que ha sido de lo más sorprendente ya que he visto a una mujer cercana, inteligente, ingeniosa, con un gran sentido del humor y para nada inaccesible o fría, al contrario. La Virginia Woolf que he descubierto es una mujer de carne y hueso fuerte, pero a la vez frágil con sus dudas y miedos.

La correspondencia empieza cuando Virginia Woolf era aún Virginia Stephen, una adolescente de 19 años que vivía en Hyde Park Gate, Kensington. Cuando esta etapa finaliza, comienza la etapa de Bloomsbury (creo que no necesita ninguna presentación) para dar paso a Hogarth Press, la editorial que Virgnia y su marido Leonard fundaron y finaliza con Monk’s House, la última casa del matrimonio Woolf.


Virginia (derecha) con sus hermanas Vanessa (izda.) y Stella (centro)

Muchos consideran que Dardos de papel no es ninguna biografía, pero yo no lo he sentido así. He conocido más a Virginia a través de sus cartas que a través de una biografía ya que he visto su lado más íntimo y personal. En sus cartas no había florituras ni formalismos ni nada. Su lenguaje era directo y muy personal. Una de las cosas que más me han enternecido es que Virginia no consideraba sus obras como algo bueno. Incluso no quería dedicárselas a sus amigos más intelectuales ya que pensaba  que no merecían estar en sus historias ya que ellos eran mucho mejores.

Virginia Woolf tenía una mente privilegiada, con un mundo interior muy rico que necesitaba ser plasmado en un papel. Estas cartas también me han servido para conocer no solo a Virginia, sino también a las personas que la rodeaban como su marido Leonard, su hermana Vanessa y su cuñado Clive Bell o compañeros del círculo de Bloomsbury como el artista Duncan Grant, entre otros. Reconozco que me he hecho un lío con estas personas ya que todos llevaron una vida muy ajetreada no solo artísticamente, sino también sentimentalmente. La de líos que hubo en este famoso círculo. En ocasiones, me tuve que leer dos veces el mismo párrafo porque pensaba que lo había malinterpretado.

Otros dos puntos acerca de Virginia han sido su inestabilidad emocional y su sexualidad. Desde muy jovencita sufrió depresiones (el trastorno que padecía es lo que ahora conocemos como trastorno bipolar) y podemos ver la manifestación de esta enfermedad en algunos de los fragmentos.

Sin embargo, por otro lado, tenemos la sexualidad de Woolf. Siempre pensé que Virginia era lesbiana, pero en realidad era bisexual. En este libro podemos ver la aparición de Vita Sackville-West, mujer a la que Virginia admiraba profundamente. Las líneas dedicadas a esta mujer son un tanto ambiguas, pero dan a entender que las dos mujeres eran amantes y se querían. Tuve que buscar información sobre Vita y Virginia ya que no me había quedado muy clara su relación. Yo había interpretado que entre ellas había algo más que una profunda amistad y veo que mi interpretación no iba desencaminada. Sin embargo, me sorprendió descubrir, y en el buen sentido, que el matrimonio entre Leonard y Virginia fue un matrimonio feliz y que ambos se querían. 


Vita Sackville-West

He dicho anteriormente que estas cartas comienzan cuando Virginia cuenta con 19 años y acaban, como muchos de nosotros podemos suponer, con su carta de suicidio a su marido.

Cuando llegué a su última carta en la que se despide de su marido, antes de dirigirse al río Ouse para poner fin a su vida, y  le confiesa que ya no puede más y tiene miedo de enloquecer, te das cuenta de la increíble vida que tuvo esta escritora. Fue una mujer adelantada a su tiempo con una mente brillante que hizo grandes cosas, pero parece que todos los genios tienen un final trágico. Parece que todos siguen un mismo patrón y es una pena.


Virginia y su sobrina Angelica

Virginia Woolf tuvo una vida muy interesante, pero sus descendientes no se quedan atrás. He leído artículos sobre ellos, en especial de su sobrina Angelica Garnett, y son muy  interesantes. 

Actualmente, creo que Virginia es el rostro más representativo del círculo de Bloomsbury debido a su legado literario, pero muchos piensan que los miembros de ese círculo hoy en día son más conocidos por su estilo de vida que por su obra. Algunos los definen como unos auténticos hippies.

Esta lectura ha sido de lo más agradable e interesante ya que he descubierto a una mujer completamente desconocida. He descubierto a una mujer inteligente, divertida y fuerte, pero a la vez frágil e insegura. Además estas cartas vienen acompañadas con fotos e ilustraciones de los componentes de Bloomsbury que hace este libro más completo todavía.

Me ha gustado muchísimo y dentro de unos días espero hacerme con Orlando, una de las novelas de Virginia Woolf.


¡Hasta la próxima!


10/10
 
 
 




Comentarios

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Después de leer tu reseña (preciosa, por cierto) me entran unas ganas enormes de ponerme a leer estos dardos: hay algo realmente especial en leer la correspondencia de un escritor (sobre todo si es alguien cuya obra admiras), y Virginia Woolf tiene pinta de haber tenido una vida fascinante.

    Esa última carta de suicidio, ufff...

    ResponderEliminar
  3. ¡Hola Marta!

    Muchas gracias por tus palabras :) La verdad e sque si mi reseña te ha parecido bonita espera a leer este libro porque es una PRECIOSIDAD. Mis palabras no le han hecho justicia para nada. Además, te sumerges en sus palabras y el tiempo se te pasa volando. Te lo recomiendo muchísimo. Da igual si eres admiradora o no de su obra ya que encandila.

    ¡Un beso muy grande!

    ResponderEliminar
  4. Hola.
    Acabo de caer por aquí y me encuentro con Virginia Woolf. Todo un lujo. Si te parece, me quedo.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola y bienvenida!

      Muchas gracias por pasarte y quedarte. Para mi es todo un halago. Si tú te quedas en mi pequeño rincón yo harÉ lo mismo con el tuyo :) A partir de ahora tienes otra seguidora más :)

      ¡Un beso!

      Eliminar
  5. Hola Laura, no sabía que habías vuelto :)
    Soy una de esas a las que le parece más interesante la vida de Virginia Woolf que su obra, será que leí La señora Dalloway y no me gustó, así que la dejé de lado. Algún día he de animarme con otra novela.
    Un beso ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Minea!

      ¡Cuánto tiempo! Me alegra volver a verte por aquí :) Volví hace unos días y todavía me tengo que poner al día con todos los blogs :)
      Yo de Woolf leí Londres hace mucho tiempo y luego los dos libros que menciono en esta entrada. Tengo curiosidad con Orlando, a ver qué tal.

      ¡Un beso enorme. Minea!

      Eliminar
  6. ¡Hola, Laura!
    Conozco la vida de Virginia Woolf, pero no he leído nada de ella, aunque dicen que sus obras son muy buenas. Aunque a los autores se les conocen por sus obras, las cartas personales son mucho más intímas, por lo que como bien dices, seguro que ha sido todo un descubrimiento. No sé si leer algo de ella, aunque las cartas son toda una tentación, esperaré a que comentes algo más en tu blog.
    ¡Un besote!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola, Mari Carmen!

      Es verdad que ha sido todo un descubrimiento ya que me había formado una imagen de ella completamente errónea. Pues tengo pensado leer "Orlando" ya que se inspiró en su amiga Vita a la hora de escribirla. Cuando la lea, publicaré su corresponidente reseña :)

      ¡Un beso muy grande!

      Eliminar
  7. Pese a haber escuchado mucho sobre Virgina Woolf y haber leído sobre ella, me avergüenza reconocer que no he leído ninguno de sus libros. Tendré que ponerle remedio.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!

      No hay que avergonzarse por no haber leído a una autora como Virginia Woolf :) ¡La de autores que aún me tengo que leer! Nunca es tarde ;) Yo de Virginia Woolf solo he leído "Londres" así que como puedes ver tampoco he leído mucho de ella.
      Veo que te has hecho seguidor, así que también me haré seguidora del tuyo :)

      ¡Un saludo y gracias por pasarte!

      Eliminar
    2. ¿¡Cómo no hacerse seguidor!?
      Gracias por darme una oportunidad, nos leemos.
      ;)

      Eliminar
  8. La conozco pero no he leído ninguno de sus libros :S a sí que tendré que ponerme a ello. Me ha encantado tú reseña y creo que me leeré este libro :D Sin duda nos lo has dibujado como algo muy especial.

    Bss

    ResponderEliminar
  9. ¡Hola!

    La verdad es que es un libro muy especial y he disfrutado mucho con su lectura. Yo tampoco he leído mucho de ella y creo que este es un libro perfecto no solamente para conocerla a ella sino también su obra. Si lo lees espero que te guste :)

    ¡Un abrazo y gracias por pasarte!

    ResponderEliminar
  10. Laura ¡como he disfrutado con tu entrada!
    Es que Virginia es una de las escritoras que más me fascinan. ¡Que mente tan brillante tenía! Cada ensayo suyo que leo me abre los ojos a un sinfín de temas, que aunque a veces puedan parecer banales, ella los llena de erudición.
    Conforme te iba leyendo iba reconociendo a todos esos personajes que me fascinan y de los que tanto me queda aún por aprender. Vita Sackville y sus novelas, su jardín de Sissinghurst; Vanessa Bell y sus pinturas, el círculo de Bloomsbury…¡Todo!
    Tengo que reconocerte que todavía no he leído las novelas de Virginia. Empecé con La olas, y me di cuenta del desafío que suponía entender su obra, su sensibilidad. Por eso me he lanzado con sus ensayos, biografías y todo lo que se haya escrito sobre ella. Por eso tus Dardos me llegan como un regalo.
    Estoy deseando añadirlos a mi estantería :)
    Espero disfrutarlos tanto como tú.
    ¡Un beso grande!

    ResponderEliminar
  11. ¡Hola, Marie!

    Cómo tú bien dices, Virginia era una mujer muy especial. He leído varios de sus ensayos y a través de ellos se puede ver que fue una mujer brillante, que a día de hoy sigue inspirando a muchas personas. Yo tampoco he leído ninguna de sus novelas. Me gustaría leer "Orlando" debido a Vita. Por lo que tú dices y por lo que me han contado algunas de las personas que la han leído cada novela suya es un pequeño reto que te invita a superarlo :) "Dardos de papel" es un libro precioso que he disfrutado muchísimo y sé que a ti también te gustará :)

    ¡Un beso enorme!

    ResponderEliminar
  12. Yo descubrí a Virginia gracias a estos Dardos de papel: los encontré en la biblioteca cuando debía tener unos 15 años y pasaba los veranos allí así que mi primer contacto con ella fue ya con esa cara más personal de ella. De hecho, a partir de ahí me quedo siempre con sus ensayos, diarios y cartas que no con las novelas.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  13. ¡Hola, Laura!

    La verdad es que todavía no he leído ninguna de sus novelas, pero mucha gente dice que prefiere sus ensayos, diarios y cartas en vez de sus obras. Es bastante curioso. Yo he leído ensayos suyos y me encantan, disfruto mucho con ellos. Yo también suelo pasar los veranos en la biblioteca jeje Los que trabajan en ella ya me conocen y deben estar hartos de mí xD

    Un besito :)

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares