Todos deberíamos ser feministas, de Chimamanda Ngozi Adichie



¡Hola, chic@s! Hoy, 8 de marzo, miles de mujeres saldrán a las calles para reivindicar sus derechos y buscar un mundo en el que hombres y mujeres seamos iguales en todos los aspectos. Siempre que se acerca esta fecha me gusta escribir sobre una mujer que haya contribuido a cambiar la imagen tradicional que se tiene de nosotras y por este motivo, el año pasado escribí sobre Carrie Fisher y su libro El Diario de la Princesa. Hoy, y justo un año después de aquella entrada, os traigo a Chimamanda Ngozi Adichie y su ensayo Todos deberíamos ser feministas.

Este ensayo es una versión revisada de la magnífica conferencia que dio en 2012 para TEDxEuston en la que habló de feminismo y para hacerlo se basó en sus experiencias vividas en Nigeria, su país de origen. Desde muy pequeña, Chimamanda fue una niña con voz propia y esto no ha cambiado con el paso del tiempo ya que ha acabado convirtiéndose en una mujer fuerte, inteligente, independiente… y feminista. En este ensayo la autora explica cómo el hecho de declararse feminista le ha proporcionado algún que otro comentario negativo, tanto de hombres como de mujeres, y por lo tanto, habría que dejar de estigmatizar una palabra que no tendría que tener ninguna connotación negativa. Crecemos con unas ideas preconcebidas que no son más que barreras entre hombres y mujeres y tendríamos que desaprender todo lo que nos han enseñado hasta ahora para vivir en un mundo más justo. Muchos pueden pensar que las experiencias de Chimamanda no serán las mismas que las que, por ejemplo, vivimos en España ya que se trata de una mujer Nigeriana. Sin embargo, es todo lo contrario, ya que sus experiencias también las hemos vivido nosotras y por eso nos identificamos con ella. El sexismo es universal, no tiene fronteras, no entiende de idiomas y es exactamente igual en todo el mundo. Por lo tanto, la educación es vital para que las nuevas generaciones se liberen de todos los prejuicios con los que nosotros hemos crecido.

Chimamanda explica todos los momentos vividos a través de un lenguaje sencillo y directo y sus experiencias, a pesar de tratarse de temas con los que hay que ponerse manos a la obra, vienen acompañadas de un sentido del humor muy elegante. Es cierto que los temas que expone pueden parecer muy básicos, pero creo que es un libro perfecto para iniciar a las lectoras y a los lectores en el mundo del feminismo y para que de esta manera empiecen a apreciar todas esas diferencias que existen entre hombres y mujeres y que a pesar de ser vistas como algo normal, en realidad no lo son.

Todos deberíamos ser feministas es uno de esos textos que mientras lo vas leyendo no puedes parar de asentir con la cabeza. Vivimos en una sociedad en la que vamos avanzando, es cierto, pero aún nos queda mucho camino por recorrer. La lucha de la mujer es una batalla que va a paso lento, pero sé que tarde o temprano, y aunque cueste, la victoria se irá haciendo cada vez más visible en el horizonte. Chimamanda es una mujer inspiradora y admirable y su texto es una muestra de ello. Os animo a leer su ensayo, son poco más de 50 páginas y se lee muy bien, y también a conocer su obra ya que es una autora excelente.

¡Feliz Día de la Mujer!

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Comentarios

  1. Laura..., todos deberíamos ser feministas y todos deberíamos leer a Chimamanda. Esta pequeña (solo por el tamaño, ya que es grande) joyita, la leí en menos de una hora y me pareció un perfecto compendio de todo lo que hay que saber y lo más importante acerca del feminismo (como un Manual de usuario) y estoy convencida de que debería ser lectura obligada en institutos y colegios por todos los adolescentes y adultos
    Tengo que leerme más cositas de esta genial autora
    Besos

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    Respuestas
    1. ¡Hola, Marian!

      Estoy de acuerdo en todo lo que dices. Este ensayo de Chimamanda es perfecto para adentrarse en el feminismo. Me gustaría mucho que se leyera en colegios e institutos, además es cortito, para concienciar a los más jóvenes y de paso, generar diferentes debates.

      ¡Un beso muy grande!

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