Una Educación, de Tara Westover
¡Hola, chic@s!
Ayer por la noche me fui a la cama dándole vueltas a la cabeza
debido al libro que hoy os
voy a reseñar: Una
educación, de
Tara Westover. Había oído hablar muy bien de él y cuando vi que lo
tenían en el
catálogo de
la biblioteca lo cogí sin pensarlo. Ayer por la noche, cuando me
fui a dormir, me quedaban apenas 30 páginas para acabar estas
memorias, y mi cabeza se formulaba la misma pregunta una y otra vez:
¿Qué pasará con Tara?
Una
educación son
las memorias de Tara Westover, una chica criada en las montañas de
Idaho, y
que
llegó a estudiar en Cambridge y Harvard, dos de las universidades
más importantes del mundo. Si habéis leído hasta aquí pensaréis
que esta historia no destaca por nada en especial, pero para llegar a
Cambridge y Harvard, la protagonista y los lectores tendrán que
hacer un viaje que no resultará nada fácil. Tara crece rodeada por la naturaleza y con la constante vigilancia de la Princesa India, la imponente
montaña testigo de todos sus pasos. La joven pertenece a una familia
mormona fundamentalista y tanto ella como sus hermanos (y
también
su
madre)
viven doblegados a la palabra de su padre, un hombre cuyo fanatismo
le impedirá ver la realidad, y cuyo
fervor afectará, de una manera u otra, a sus hijos. Los Westover no
van al médico ni a la escuela porque creen que los derechos que
todos deberíamos tener los carga el diablo y por eso, viven
encerrados en casa. Las hijas ayudan a la madre y los hijos al padre
en su desguace, una tarea que después realizará Tara. El hogar de
la protagonista es sinónimo de violencia, machismo, opresión y sufrimiento; por eso cuando la joven decide estudiar sus padres
intentarán impedir por todos los medios que su hija pequeña dé ese
paso, ya que si lo hace adquirirá conocimiento y por lo tanto, no la
podrán retener con ellos. Si Tara acude
a
los libros estos le abrirán los ojos y a través de ellos obtendrá un pensamiento propio, una identidad, y podrá hablar por ella misma.
La educación es una amenaza para toda esa burbuja que el padre ha
creado alrededor de los suyos y si su hija la
recibe
todo ese mundo se hará añicos.
Qué
puedo decir de este libro… No sé si mis palabras le harán
justicia, pero lo he acabado hace unas horas y el fantasma de Tara me
persigue; se ha apoderado de mis pensamientos y no puedo evitar
rememorar una y otra vez todas sus vivencias. La autora y yo tenemos
prácticamente la misma edad y por eso no he podido evitar verla como
una amiga. Con este libro me he enfadado y he sufrido, pero al final
esta odisea ha obtenido su tan ansiada recompensa. Se podría decir
que este libro tiene dos caras; la primera es la infancia y
adolescencia de Tara con su familia en las montañas de Idaho, y la
segunda nos narra su vida lejos de los suyos en la universidad.
Cuando las memorias transcurren en las
montañas
somos testigos de la atmósfera violenta y paranoica que se vive
allí. La Tara de Idaho es una niña que cree todo lo que su padre le
dice, y ese mundo de fantasía que su progenitor ha extendido a su
alrededor lo toma como algo real. El Fin del Mundo, los Illuminati,
la persecución del Gobierno o los médicos malvados son solo algunos
de los aspectos que rigen su vida. Cada vez que Tara se
encontraba en casa o volvía a ella durante las vacaciones
universitarias me ponía en tensión ya que la joven entraba de una
manera, pero no sabía cómo iba a salir debido a la crueldad de
algunos de los miembros de su familia.
Tara Westover (Fotografía: BBC) |
La
segunda parte del libro transcurre cuando Tara decide salir de su hogar para
estudiar, y aquí el lector y la protagonista irán descubriendo a paso lento pero seguro a una nueva chica, que va de camino a la vida adulta, y la
educación le hará abrir los ojos a un mundo totalmente nuevo.
Tara descubre la gran ignorancia que posee y poco a poco, y como si
se tratara de una niña pequeña, se irá sorprendiendo de todas las cosas que la
vida le puede ofrecer. En esta segunda mitad la joven empieza a ser consciente de sus
capacidades intelectuales y de todo lo que puede llegar a hacer y ser, y
esto es algo con lo que nunca había soñado ya que no se veía capaz de ello. Su
autoestima estaba mermada debido al entorno en el que había crecido, pero empieza a madurar y a explotar todo su potencial. Su
conocimiento aumenta, además
de ir desquitándose
de
todo
lo que su familia le ha inculcado, y empieza a crear su propia
identidad. Sin
embargo,
esta nueva etapa no es un camino de rosas, porque aunque haya dejado
la montaña, la Princesa India sigue acechándola. Esta
segunda mitad del libro es muy interesante y a la vez compleja porque
la vemos crecer en todos los sentidos, pero también vemos cómo en
ella se empieza a fraguar un conflicto interno muy intenso que la hará
enfrentarse a esos dos mundos a los que pertenece y que son completamente incompatibles. ¿Podrá compaginarlos
o tendrá que cortar los lazos con uno de ellos?
A
pesar de tratarse de una biografía este libro podría ser
perfectamente una novela ya que no está narrado como esa biografía
que todos tenemos en la cabeza. La historia de Tara echa mano de los
diálogos y eso no solo hace que el libro sea más ameno sino que
aumenta la cercanía con la historia ya que vemos hablar a los
personajes. Te metes de lleno en ese mundo y parece que estás siendo
un testigo directo de todo lo que ocurre. Tara, a través de sus
palabras, define muy bien a todas esas personas que la acompañaron
en su travesía, tanto
para
bien como para mal, y
todas ellas despiertan en ti mucha clase de sentimientos. Tyler, el
hermano comprensivo e intelectual, me provocó compasión y ternura,
pero el padre de Tara y Shawn, uno de sus hermanos, representan lo
peor del ser humano. La madre de la autora es de lo más interesante
ya que esta vive en un constante conflicto y yo como lectora también
lo viví ya que no sabía qué esperar de ella. Por un lado, parece
entender a su hija; pero por otro el miedo y el fanatismo parecen
ganar la partida.
Todo
aquello por lo que había trabajado y todos los años de estudio
habían tenido el objetivo de permitirme adquirir un único
privilegio: el de ver y experimentar más verdades que las que mi
padre me brindaba, y aprovecharlas para construir mi propio
pensamiento. Había llegado a convencerme de que la capacidad de
evaluar muchas ideas, muchas crónicas, muchos puntos de vista era la
base de lo que significa crearse a una misma. Si cedía, perdería
algo más que una discusión. Perdería la custodia de mi
pensamiento. Comprendí que ese era el precio que se me pedía que
pagara. Lo que mi familia quería expulsar de mí no era el demonio;
querían expulsarme a mí misma de mí.
Una educación es
uno de esos libros que atrapan ya que la historia te absorbe y en mi caso, buscaba cualquier momento del día para perderme en el testimonio de Tara. El libro impacta por su crudeza, pero al mismo tiempo la
historia me ha enamorado por todo el crecimiento personal
e intelectual que experimenta la autora. Sus desdichas han sido las mías al igual que sus
triunfos. Cuando hace unas horas he cerrado el libro me he sentido orgullosa porque
cuando llegas al final ves a Tara convertida en una mujer fuerte,
luchadora, independiente y con voz propia. Sin ninguna duda, estamos
ante una historia inspiradora, enriquecedora y conmovedora que nos habla de la importancia de
creer en uno mismo y de lo maravilloso que es tener una educación,
porque aunque parezca muy obvio, e incluso para algunos un poco
remilgado, este libro nos demuestra una vez más que el
conocimiento es poder.
Si tenéis la oportunidad de leer
Una educación,
hacedlo, no os
arrepentiréis.
¡Hasta la próxima!
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Instagram: laura_lamiel
¡Hola Laura! Sí, voy a tener ocasión de leerla porque lo tenemos en la biblio, de hecho lo he tenido varias veces en las manos desde que llegó porque se presta mucho. A veces he tenido tentaciones de cogerlo, pero no sé porqué hasta ahora no lo he hecho, así que es muy probable que yo también me sumerja en las memorias de Tara
ResponderEliminarBesos
¡Hola, Marian! Cuando vi que lo tenían en la biblioteca lo cogí sin dudarlo. Pensaba que no lo tendrían porque salió hace poco, pero tuve suerte. Además, no tenía ninguna otra reserva por delante, así que en pocos días ya lo tuve en casa :)
EliminarEs un libro que se lee muy bien y te hace pensar. Es duro, pero a la vez está lleno de esperanza. ¡Espero que te guste!
¡Un beso!