Los crímenes de la calle Morgue: Antes de Holmes estuvo Dupin

¡Hola a tod@s! Tras unos días de intenso estudio debido a los exámenes ya vuelvo a ser libre para volver a este humilde rinconcito. El día de Año Nuevo escribí sobre el retorno de Sherlock, serie de la BBC, y que cómo su nombre indica está centrada en las aventuras del mítico Sherlock Holmes. El personaje de Arthur Conan Doyle es un mito universal y aunque hay gente que nunca ha leído o visto nada acerca de él todo el mundo sabe quién es. Muchos consideran a Holmes el primer detective de la literatura, pero en este sentido discrepo ya que antes de él hubo otro brillante detective creado por la maravillosa mente de un genio muy maltratado en su momento: Edgar Allan Poe. De la mente de Poe surgió el magnífico C. Auguste Dupin y, por desgracia, no goza de la misma popularidad que tiene Holmes.  Es curioso pero Poe creó a través de Dupin la figura del detective cuando este término aún no era conocido. Por lo tanto, podríamos decir que el personaje de Poe es el origen de una larga lista de detectives que podemos encontrar no sólo en la literatura sino también en cine y televisión. La primera aparición de este personaje se produce en Los crímenes de la calle Morgue (si Dupin es el primer detective, esta historia es la primera que establece los elementos del género policial), cuando una madre y su hija son brutalmente asesinadas en su casa. El macabro asesinato está envuelto por un gran misterio que parece no tener solución, pero el personaje de Dupin se encargará de mostrarle al lector la verdad que hay tras él. Nadie ha visto nada a excepción de unas voces. Una de ellas hablaba francés pero la otra no se sabe muy bien qué idioma hablaba. La escena del crimen es dantesca y muestra una gran brutalidad. ¿Quién ha podido cometer un crimen tan atroz?

Los crímenes de la calle Morgue es, junto a El escarabajo de oro, dos cuentos que me tuve que leer para una de mis clases de literatura en el instituto. Muchas veces reconozco que no he disfrutado de las lecturas que me han mandado, pero en este caso los cuentos de Poe me entusiasmaron. El escarabajo de oro me gustó mucho pero Los crímenes de la calle Morgue... Tengo devoción por esta historia. Siempre me han gustado las historias policíacas en las que el autor envuelve el caso de un gran misterio haciendo que su lectura se vuelva adictiva, ya que quieres ver cuál es el gran secreto que aguarda para ser descubierto. Por otro lado, me encantan las historias en las que siempre hay algún elemento sobrenatural y, en este caso, Poe juega mucho con eso haciendo que este cuento tenga un magnetismo del que es muy difícil escapar. Empecé a leer la historia sin saber de qué iba y una vez que empecé no pude parar. Recuerdo perfectamente que era invierno y en mi casa teníamos una estufa de leña. Me puse al lado de ella y devoré el libro en una tarde. ¡Qué bien me lo pasé! No podía dejar de especular sobre el autor o autores de este doble asesinato tan espantoso. ¿Qué mente puede hacer algo así? La historia está muy bien construida y el personaje de Auguste Dupin es la estrella del cuento. Es un detective no profesional, podríamos llamarlo aficionado, con una gran capacidad de análisis, deducción lógica, intelecto y creatividad. Dupin se pone en el lugar del asesino además de buscar pistas en otros medios como, por ejemplo, los periódicos. Toda la trama está muy bien hilada y envuelta de un gran misterio. A medida que iba pasando las páginas tenía cada vez más ganas de descubrir al autor o autores pero, por otro lado, no quería que se acabara. Cuando al final descubrí la verdad... ¡no me lo podía creer! Nunca había pensado en ello y eso me encantó ya que me sorprendió. Después de mi lectura decidí leer dos cuentos más que iban incluidos en el libro, y que no eran de lectura obligatoria, cómo El misterio de Marie Rogêt y La carta robada. Desde ese día Poe me ha acompañado y ya han pasado unos cuantos años. 

Esta madrugada, alrededor de las tres, los habitantes del quartier Saint-Roch fueron despertados por una serie de espantosos gritos que parecían proceder del cuarto piso de una calle de la rue Morgue, ocupada, según se dice, por una tal madame L'Espanaye y su hija, mademoiselle Camille L'Espanaye. Después de algún tiempo empleado en infructuosos esfuerzos para poder penetrar bruscamente en la casa, se forzó la puerta de entrada con una palanca de hierro, y entraron ocho o diez vecinos acompañados de dos gendarmes. En ese momento cesaron los gritos; pero en cuanto aquellas personas llegaron apresuradamente al primer rellano de la escalera, se distinguieron dos o más voces ásperas que parecían disputar violentamente y proceder de la parte alta de la casa. (...) Al llegar, por último, a una gran sala situada en la parte superior del cuarto piso, cuya puerta hubo de ser forzada por estar cerrada interiormente con llave, ofrecióse a los circunstantes un espectáculo que sobrecogió sus ánimos, no sólo de horror, sino también de asombro.

Los crímenes de la calle Morgue es un cuento del género policial que contiene grandes dosis de misterio y alrededor de él hay una atmósfera un poco gótica y macabra que lo hacen realmente atractivo. Os lo recomiendo muchísimo porque vais a disfrutar de lo lindo. Por otro lado, y para finalizar, quiero reivindicar la figura de C. Auguste Dupin ya que fue el primer detective de la literatura y, aunque tengo debilidad por Sherlock Holmes, no puedo evitar tenerlo en muy alta estima ya que es un personaje realmente brillante. Para muchos, es incluso mejor que Holmes. Yo, en mi caso, no puedo elegir entre los dos pero es cierto que al personaje de Poe le tengo un gran cariño. A lo mejor es porque nunca había oído hablar de él y su descubrimiento fue una muy agradable sorpresa. Bueno chic@s, aquí acaba mi contribución de hoy. Nos vemos en unos días.

¡Hasta la próxima!

10/10