Persuasión: Novela vs Película

 

¡Hola, chic@s! Ya he vuelto de mis vacaciones con las pilas cargadas, aunque una semanita más me vendría bien, no os voy a mentir, pero hay que regresar y un año más arranco un nuevo curso en el blog que promete estar lleno de series, libros y cine.

Septiembre es sinónimo de nuevos comienzos y por ello he decidido empezar con una historia de segundas oportunidades que fue escrita hace más de dos siglos por Jane Austen y de la cual Netflix estrenó una nueva adaptación el pasado mes de julio. ¿Sabéis de qué libro estoy hablando? ¿No? Para los más despistados (y para aquellos que no hayan leído el título de la entrada de hoy) os diré que se trata de Persuasión, la novela póstuma de Austen, y que además es una de las más recordadas de su obra. Hace unos días vi la adaptación protagonizada por Dakota Johnson y hoy vengo para hablar de las diferencias que hay entre el libro y la película.

Persuasión tiene como protagonista a Anne Elliot, una mujer de 27 años que vive sumida en la melancolía y la tristeza desde que a los 19 años decidiera romper su compromiso con el Capitán Frederick Wentworth, un joven que por aquel entonces no contaba con la aprobación del círculo más cercano de la protagonista debido a su falta de rango y dinero. Anne y Frederick estaban profundamente enamorados, pero esta fue persuadida por sus familiares y amiga más íntima para que dejara a Wentworth, ya que no les convenía una unión tan desigual. La juventud y la inocencia hicieron que Anne le dijera adiós a su alma gemela, sumiendo a ambos en un profundo dolor. Desde entonces la juventud de Anne se ha ido marchitando poco a poco, pero además de esto el amor tampoco le sonríe y su familia la ignora por completo (su padre y sus hermanas son para darles de comer aparte). Está sola y la vida se le escapa de las manos; es una mera observadora. Sin embargo, la vida da muchas vueltas y ahora la familia de Anne pasa por apuros económicos, algo que les obligará a tomar cartas en el asunto, y es en este preciso momento de crisis, cuando Wentworth vuelve a aparecer en escena, pero esta vez en una posición envidiable. Parece que el destino ha hecho que sus papeles se intercambien y, con el retorno de Frederick, seremos testigos de las deliberaciones internas de Anne y de cómo su relación con su gran amor irá evolucionando a través de miradas y silencios que dicen mucho.

Persuasión es la novela más madura, reflexiva y profunda de Austen y en sus páginas se nota la etapa que estaba viviendo su autora. Las anteriores protagonistas de la escritora estaban llenas de vida y juventud, y estas sabían que tenían el mundo por delante, pero Anne es todo lo contrario. No obstante, y como he dicho antes, esta es una novela de segundas oportunidades, y toda heroína merece su final feliz.

Fuente: Netflix

Cuando Netflix anunció que estaba trabajando en la adaptación de Persuasión, muchos fueron los que la esperaban con impaciencia, pero luego llegó el tráiler y aparecieron las primeras alarmas, y entonces se estrenó la película y las redes sociales estallaron.

Vamos a ver, sabía que la adaptación no seguía de manera fiel el espíritu de la novela, pero desde mi punto de vista lo destroza por completo. La película coge a los protagonistas y la base de la historia, pero su esencia no está ahí. Pero por ningún lado. Ni aunque la busquemos de manera incansable. No hay rastro de ella. Nos encontramos en un momento en el que las producciones de época están disfrutando de su máximo apogeo; un ejemplo claro son los Bridgerton, pero últimamente se están tomando muchas licencias en este tipo de historias, ya que optan por modernizarlas y añadir elementos que no deberían estar ahí por su contexto histórico/cultural/social. En algunos casos estos cambios sientan bien porque son versiones libres que no se dejan llevar por el rigor histórico, pero hay clásicos que no se deben tocar y deben mantener esa personalidad que ha hecho que sobrevivan al paso del tiempo, y este es el caso de Persuasión. Anne Elliot es una heroína muy especial y ella es el corazón de la historia, ya que todo gira en torno a ella, pero en la adaptación, Dakota Johnson, la encargada de darle vida, tiene una personalidad opuesta al personaje original. En la película Anne es una chica muy despierta y perspicaz, que tiene tintes cómicos y es un poco bocazas. Incluso ha habido momentos en los que he pasado vergüenza ajena por diferentes decisiones que ha tomado y que desentonan por completo con la Anne original. Esto ha hecho que no conectara con la historia y que finalmente no me haya dejado huella, ya que no he visto a la mujer que yo esperaba. Por otro lado, su historia de amor con Wentworth no me ha impactado de la misma manera que lo hizo el libro, y aquí ha pasado totalmente de puntillas. Lo que sí me ha gustado es el retrato de la familia de Anne, ya que tanto en la novela como en la película se puede ver la ordinariez y la estupidez que alimentan sus “exquisitas” almas humanas.

Cuando la película acabó me quedé pensando un buen rato porque no sabía cómo catalogarla. ¿Era una comedia romántica? ¿Un drama ligero? Para compartir mis dudas me puse en contacto con mi querida Ana, del canal Ana Libronauta, y mientras hablábamos Ana llegó a la conclusión de que la Anne Elliot de Netflix era Bridget Bridgerton. Tal cual. Y cuando dijo eso mi cabeza hizo click y lo vi todo más claro. Sabía que esta adaptación de Persuasión iba a coger algunas cositas de Bridgerton, porque es lo que está de moda, pero no había caído en Bridget Jones. ¡Madre mía, la Anne Elliot de Johnson tenía muchas cosas en común con Bridget! Esto hizo que fuera atando cabos y al final también vi paralelismos entre Wentworth / Mark Darcy y William Elliot / Daniel Cleaver. ¡Ahora todo encajaba!

Personalmente creo que la adaptación no le hace justicia al libro, pero en ningún sentido. Incluso si la separamos de la novela y la queremos ver como una historia independiente, siento decir que tampoco emociona. Persuasión es un claro ejemplo de que la innovación en los clásicos no funciona, ya que si un libro sobrevive al paso del tiempo es por esa personalidad que ha hecho que diferentes generaciones de diferentes décadas (y siglos) creen un vínculo con él. Si le quitamos eso deja de funcionar. Por lo tanto, os animo a leer la novela de Austen y posteriormente a ver la adaptación para que de esta manera podamos compartir opiniones. Lo vuelvo a repetir: creo que no se le ha hecho justicia a Anne y Frederick, ya que la ligereza de la película oculta toda la profundidad y complejidad que tiene la novela. ¿Vosotros qué pensáis?

¡Hasta la próxima!

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