Ha nacido una estrella (A star is born) (2018)

¡Hola, chic@s! Hoy, os traigo la review de Ha nacido una estrella, una de las películas que estarán presentes en la próxima entrega de los Premios de la Academia. Su estreno ha estado rodeado por una gran expectación ya que la cinta dirigida y protagonizada por Bradley Cooper cuenta con Lady Gaga como protagonista y todo lo que esté relacionado con la cantante llama la atención. ¿Es Lady Gaga una buena actriz? ¿Merece la pena la película? ¡Ahora mismo os lo cuento!

Ha nacido una estrella nos relata la historia de Jackson Maine (Bradley Cooper), un músico en horas bajas debido a sus adicciones que se enamora de Ally (Lady Gaga), una chica humilde que posee un enorme talento para la música. La pareja inicia una apasionada relación sentimental y con ella vendrá el despegue de la carrera musical de Ally y la caída a los infiernos de Jackson.

Bradley Cooper ha escogido esta película para su debut detrás de las cámaras y la verdad es que su elección ha sido de lo más peculiar ya que Ha nacido una estrella no es una historia original, sino la cuarta versión de un clásico que muchos ya conocen de antemano. Esto podría haber sido un hándicap para el actor ya que se trata de un film que ya ha sido llevado al cine en más de una ocasión, pero Cooper ha sabido jugar muy bien sus cartas reinventado una historia que ha sabido calar al público y llevándose con él a Lady Gaga, una artista que congrega a las masas. La atención ya estaba más que asegurada.

La primera mitad de la película nos muestra el enamoramiento de los protagonistas y en ella la música tiene un papel fundamental. Sin embargo, en la segunda parte la música cede su sitio al lado más dramático de la historia en la que Ally triunfa como cantante y Jackson se ve superado por sus propios demonios, lo que provoca una gran crisis en la pareja. A muchos, esta cara más dramática les ha parecido pesada, pero no pienso lo mismo ya que es primordial para completar el viaje final de los dos personajes principales y no solamente permite que Cooper y Gaga se luzcan en sus interpretaciones sino que también que la historia se quede con el espectador.

En cuanto a los actores debo decir que ambos están maravillosos y comparten una química envidiable. Cooper vuelve a demostrar que es un gran actor interpretando a un personaje con luces y sombras. Es atractivo y carismático, pero a la vez autodestructivo, y aun así sientes una gran atracción por él porque a pesar de su conflictiva personalidad éste tiene una parte humana que nos muestra su fragilidad y bondad. Lady Gaga, seamos sinceros, es la que mayor presión tenía porque todos íbamos a estudiar su interpretación con el más mínimo detalle, pero la cantante ha salido victoriosa ya que su Ally es un personaje de lo más completo que empatiza con el público desde prácticamente el primer momento que aparece en pantalla. Gaga se desprende de sus extravagancias y aquí se desnuda para mostrarnos el lado más humano de una chica indecisa que no cree en si misma para ir dando paso poco a poco a una mujer fuerte y segura, pero que sigue conservando su vulnerabilidad. El talento musical de Gaga es incuestionable y su faceta dramática me ha convencido.

La banda sonora de esta película es una maravilla y sus letras me han gustado mucho porque todas cuentan una historia. No sé vosotros pero el tema I’ll never love again me ha recordado a la música que solía cantar la inolvidable Whitney Houston (sin nombrar la poderosa puesta en escena e interpretación de Gaga a la hora de cantar este tema, que no hacen más que incrementar este sentimiento). Es una canción que emociona y es una de mis apuestas para llevarse una nominación al Óscar a la mejor canción. Muchos apuestan por Shallow como posible ganadora pero la fuerza, el sentimiento y la elegancia de I’ll never love again merecen el premio.

Ha nacido una estrella tiene como protagonista el romance entre dos artistas que sienten un gran amor por la música y vemos cómo esta es el motor de sus vidas. Sin embargo, esta cinta también nos muestra la cara más dulce y amarga de la fama y cómo el éxito nos puede llegar a cambiar. Nos habla de ser fieles a nosotros mismos, aunque en ocasiones no nos sea fácil. Es una historia dura que conmueve y me gustó de principio a fin. Cooper y Gaga se lucen en sus papeles y veo para ambos sendas nominaciones a los Óscar. Ahora toca ver si Lady Gaga, en el caso de ser nominada, se lleva la estatuilla a casa. ¡El 24 de febrero lo sabremos!

¡Hasta la próxima!

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Fotografías: Insider