Recordando a Matthew Perry

 

Fuente: Us Weekly

¡Hola, chic@s! Esta es una de esas entradas que una nunca querría escribir, pero pienso que de alguna manera se lo debo. El pasado domingo nos levantamos con la noticia del fallecimiento de Matthew Perry, el mítico Chandler Bing de la serie Friends. La noticia me impactó, pero a medida que iba pasando el día se fue apoderando de mí una sensación de melancolía, vacío e incredulidad que se iba haciendo cada vez más grande. Debido a esta serie de emociones, me puse a pensar en mi historia con la serie y me di cuenta de que tanto él como el resto del reparto han estado a mi lado desde que tenía alrededor 13 años. Empecé a ver la serie cuando Canal + comenzó a emitir en abierto algunas temporadas y desde entonces me enganché a ella. Soñaba con tener una vida adulta como la de ese grupo de amigos y estos han estado conmigo tanto en los buenos como en los malos momentos (sé que es un tópico, pero es la pura verdad). Llevo con ellos más de 20 años y, por lo tanto, quieras o no es imposible no crear un vínculo con estos personajes. Siempre que se hacen encuestas sobre quién de los 6 amigos es el más querido por la audiencia el personaje de Perry es el que encabeza la lista. ¿Por qué? Pues porque simplemente Chandler nos representaba. Personalmente pienso que era el más humano porque mostraba como nadie las inseguridades que todos podemos tener en algún momento y cuando salía vencedor muchos de nosotros hacíamos de su triunfo también el nuestro. Además de esto, su sentido del humor era fantástico y no podías evitar reírte con él porque tenía una respuesta para cualquier situación. Por otro lado, poco a poco fue madurando y dio paso a una versión mucho más segura de sí mismo. Su noviazgo y matrimonio con Monica (Courteney Cox) ayudó mucho a la evolución de Chandler, ya que gracias a su relación con la benjamina de los Geller, este empezó a enfrentarse a esos miedos que lo habían atacado desde siempre, entre los que se encontraban, curiosamente, el compromiso y la paternidad. El Chandler de la primera temporada no tiene nada que ver con el de la última y su personaje se despidió rebosando felicidad y estabilidad.

A principios de 2023 tuve el privilegio de leer Amigos, amantes y aquello tan terrible, unas memorias con las que Perry se abrió en canal y expuso la parte más dura de su vida: aquella que estaba relacionada con sus adicciones. Cuando terminé de leer aquel libro pensé que Matthew Perry y Chandler Bing eran la misma persona, aunque ambos habían cogido caminos muy diferentes. Mientras que Chandler evolucionó y consiguió la felicidad, Perry no parecía salir del agujero en el que estaba metido. Al igual que Chandler, el actor era una persona con problemas de autoestima y usaba el humor cuando se sentía incómodo. Los paralelismos eran constantes y se me partía el alma cuando veía cómo él mismo se boicoteaba al pensar que no era lo suficientemente bueno para nadie. Debido a esto se me vino a la cabeza un episodio de la segunda temporada de Friends, cuando el vecino de Monica y Rachel muere y este se lo deja todo a ellas en modo de venganza. El vecino en cuestión era un hombre solitario, no tenía a nadie, y finalmente fallece solo. Chandler tiene miedo de acabar como él, pero sus amigos le aseguran que no será así. Efectivamente el final de Chandler es completamente lo opuesto, pero no así el de Matthew Perry, y me entristece mucho porque los miedos de su personaje finalmente fueron adquiridos por él.

Al principio de la entrada he comentado que debía escribir este post porque, de alguna manera, se lo debía a Perry. He seguido muchas series a lo largo de mi vida y con algunas de ellas he llegado a sentir un amor genuino por los personajes que traspasaba la pantalla. Friends es una de esas series. Cuando leí sobre el fallecimiento de Perry la primera reacción que tuve fue la de la pérdida de un amigo, ya que su presencia ha sido constante en mi vida. He visto su rostro prácticamente a diario y ahora me resulta muy difícil asimilar que ese hombre tan adorable que siempre veo en pantalla ya no está con nosotros. Incluso, si me permitís la comparación, en alguna ocasión he comparado al reparto de Friends con los Beatles. No hace falta descubrir al mundo la adoración que muchos sienten por la banda de Liverpool y uno de los sueños más anhelados por los fans era verlos otra vez juntos encima de un escenario. Esta ansiada reunión no se pudo cumplir por el asesinato de Lennon, así que ese sueño murió con toda una generación. En el caso de Friends, el reparto sí que pudo reunirse con motivo del 25 aniversario de la serie, así que esta espinita ya no la tenemos, pero aun así el simple hecho de pensar que el grupo ya no está al completo duele bastante. Ya no hay posibilidad de tener otra reunión y el vacío que muchos sentimos es enorme.

Por lo tanto, desde el blog quiero agradecerle a Matthew Perry los grandes momentos que nos ha regalado. Nos ha hecho reír y emocionarnos y fue maravilloso ver a su Chandler conseguir sus sueños. Perry tuvo una vida complicada, pero eso no le impidió tener un corazón enorme, porque a pesar de sus conflictos internos, era una muy buena persona que se dedicó a ayudar a todos aquellos que habían pasado por su misma situación. Muchos temen que sus problemas personales le hagan sombra a su obra, pero en este sentido no tengo ningún miedo porque el legado que ha dejado es tan grande que nada ni nadie lo podrán destruir y sé que las siguientes generaciones caerán rendidas a sus pies. No tengo ninguna duda. Matthew, eres eterno.

¡Hasta la próxima!